Yaiza Álvarez inauguró hace apenas un año su centro de estética, Insieme Nails, en el barrio de A Ponte
02 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Hace casi un año que Yaiza Álvarez cambió por completo su vida y cumplió un sueño. La joven ourensana estudió Educación Infantil y, tras varios años preparándose para las oposiciones sin éxito, decidió cambiar su rumbo laboral como le habían aconsejado anteriormente. «Me dijeron que necesito dos opciones, por si una no me sale bien, pues tengo la otra», explica Yaiza.
Dicho y hecho. En septiembre del 2024 la futura profesora abrió su propio salón de uñas, Insieme Nails, en el barrio de A Ponte. Pero su paso por el mundo de la estética se remonta a hace ya algún tiempo. «Hace cinco años que empecé, mientras estaba en el último año de la oposición, me dediqué a estudiar y cuando terminé, empecé a trabajar por las mañanas en una guardería y por la tarde haciendo uñas», recuerda la esteticista.
Se formó en Lito Seoane y empezó a trabajar desde el primer momento, algo que agradece: «Es muchísimo más fácil salir al mundo laboral porque vas sin miedo». Tras su paso por diferentes estudios, Yaiza decidió abrir el suyo propio, aunque no solo enfocado en la manicura y pedicura. También trabaja en otros campos de la estética. «Depilaciones, cejas, presoterapia...», enumera.
Abrir un negocio por cuenta propia puede ser un proyecto que asusta, pero Yaiza reconoce que no le resultó en absoluto complicado. «Hacerte autónoma y establecerte por tu cuenta siempre te da miedo, pero después cuando ves que te va bien y que cuentas con una cartera de clientes de antes, pues ayuda», cuenta Yaiza.
Trabajo es algo que no le falta a la joven esteticista, y menos ahora en verano. «Vienen bodas, bautizos, comuniones... Desde junio no he parado ni un solo día», comenta. Para ella no es trabajo, ya que disfruta dedicándose a algo que desde siempre le gustó, aunque reconoce entre risas que «hay días que tienes más ganas y otras tienes menos».
Sobre su futuro como profesora de infantil, Yaiza reconoce que no se arrepiente en absoluto de haber dejado las oposiciones. «Estoy convencida, y más cuando veo a mis compañeras que siguen a día de hoy», asegura. También admite que no retomaría los estudios: «Siempre está ahí la opción, nunca se sabe. La vida da muchas vueltas».