Simulacro de incendio en el edificio judicial de Ourense con 300 desalojados en seis minutos
OURENSE

El inmueble puso a prueba por primera vez desde su inauguración la capacidad de reacción ante una emergencia
10 oct 2025 . Actualizado a las 16:45 h.A las once de la mañana de este viernes las alarmas del edificio judicial de O Couto empezaron a sonar. Los detectores de humo de dos plantas inferiores saltaron al detectar gases peligrosos y los trabajadores se dispusieron a salir a la calle. El suceso podría haber ocurrido realmente, pero en esta ocasión se trataba de un simulacro —el humo lo provocaron dos bengalas— con el que se quiso testar la respuesta del edificio ante una eventual situación de riesgo. Los resultados se analizarán en días próximos, pero la primera impresión parecía positiva.
Las 300 personas que se encontraban dentro del inmueble cuando se fue la luz salieron a la calle en apenas seis minutos, utilizando las cuatro vías de evacuación existentes desde la sexta planta. Los bomberos, con dos dotaciones, tardaron siete y medio en llegar desde que recibieron el aviso y al entrar se encontraron con un desaparecido que, finalmente, fue localizado en perfecto estado y salió de la sede entre aplausos.
El de este viernes era el primer ejercicio de este tipo que se llevaba a cabo en un inmueble que se inauguró hace diez años y que se vio envuelto en polémica por estar recubierto de una reja metálica y carecer de ventanas que, con el tiempo, se han ido abriendo en algunas zonas. Nada de esto sería un hándicap ante una emergencia real. «El edificio tiene unas condiciones de seguridad muy buenas, con muchas vías de evacuación», aseguró Beatriz Fernández, directora territorial de la Consellería de Presidencia, que explicó que llevaban meses trabajando en un simulacro que contó con un amplio despliegue de medios integrado por Policía Local, Nacional, Guardia Civil y Protección Civil. «El objetivo es concienciar a la gente y detectar cuestiones que puedan ser objeto de mejora», explicó Fernández.

A los funcionarios se les había dado formación previa por parte de la Xunta, con cursos de emergencias y primeros auxilios para que estuvieran preparados para una situación de este tipo. «La gente ha respondido muy bien y queremos agradecer que se hayan tomado esto en serio», aseguró.
Manuel Rodríguez, jefe de prevención de riesgos de Ourense, detalló que se hizo inicialmente un fuego en la planta inferior, y a mayores y sin preaviso, un segundo foco en la zona del archivo, para que los bomberos pudieran poner a prueba su propia capacidad de respuesta. Desde la calle, el decano de los jueces, Leonardo Álvarez, y la fiscala jefa, Eva Regueiro, supervisaron el desarrollo de una iniciativa que se prolongó durante casi una hora. Luego los juzgados recuperaron su actividad habitual.