Justino da a la UD Ourense su primera gran alegría liguera (1-0)

La afición unionista rugió en el feudo ourensano del estadio de O Couto desde el pitido inicial, consciente de la importancia para la UD Ourense de conseguir los tres puntos ante el UP Langreo. Los del técnico local, Borja Fernández, se llevaron una ajustada victoria (1-0) gracias a un tanto de Justino en la primera mitad del partido, en un encuentro donde las ocasiones de gol llegaron hasta el último segundo del encuentro.

El partido arrancó con ambos equipos buscando imponer su ritmo, aunque sin exponerse a grandes riesgos con sus jugadas. La UD Ourense, con la novedad de Lucas Puime en el once inicial, mostró sus intenciones aunque generando pases que no acababan de crear peligro en el rival.

El Langreo tuvo la primera aproximación clara a la meta de Manu Vizoso tras un error en la salida de Parrilla, pero fueron los unionistas los que darían primero un golpe en la mesa. En una jugada por cortesía de Varo, el delantero Justino Barbosa se escapó en solitario de los rivales y remató con un disparo directo a la meta del portero del Langreo. Un tanto que hizo rugir a la afición ourensanista y que sería el único que anotaría el conjunto local.

El Langreo acusó el golpe pero continuaron apretando y mostrando sus intenciones durante toda la primera parte. La ocasión para lograr el empate llegó en el minuto 43. Un penalti realizado por Noel, el defensa de la UD Ourense, sobre Samu Pérez, sirvió en bandeja la oportunidad de oro para el Langreo. El veterano Samu Guerrero asumió la responsabilidad de realizar el disparo desde los once metros, pero se encontró con un espectacular Manu Vizoso que adivinó la intención del jugador y se lanzó perfecto a su izquierda para desviar el tiro y mantener su portería a cero antes del final del primer tiempo.

Sin cambios pero con presión

Los ourensanistas saltaron de nuevo al campo con marcha decidida a sentenciar el encuentro y sumar tres puntos. Pero el Langreo no se quedó atrás y se hizo notar pronto. Un disparo directo al larguero puso sobre aviso a los de Borja Fernández, que no pudieron bajar la guardia hasta el último instante. Con el segundo tiempo llegó el carrusel de sustituciones en ambos equipos. Una falta sobre el goleador del partido, Justino Barbosa, obligó al técnico ourensano a forzar su sustitución para reestructurar el ataque. A pesar del cansancio de los jugadores, los rojillos mantuvieron el ímpetu y a punto estuvieron de anotar un segundo tanto en el marcador. Una carrera de Santi de Prado, asistido por un pase de cabeza de Rufo, obligó a Torre a despejar el balón para evitar aumentar las diferencias. Minutos después, Jaichenko también rozó el gol tras otra asistencia de Rufo, pero el balón se les resistía a los de Borja Fernández.

A medida que el cronómetro avanzaba, el Langreo apretó, aún más si cabe, buscando de manera desesperada el empate, en ocasiones con más corazón que cabeza. Los unionistas, por su parte, demostraron solidez defensiva, a pesar del malestar físico de alguno de sus jugadores, en los minutos finales del partido. En los últimos instantes del encuentro, con cinco minutos de añadido, la UD Ourense cerró atrás sus filas para defender a ultranza su renta.

Suspiro de alivio

El pitido final se recibió como un alivio y una inyección de moral para los de Borja Fernández, que conseguían así su primera victoria de la temporada. Pese al complicado inicio que está teniendo el conjunto recién ascendido a Segunda Federación —lastrado por tres empates y tres derrotas, dos de ellas en casa—, los tres puntos conseguidos por la mínima en O Couto, y que los aúpa algo más arriba en la tabla de la clasificación, y aporta confianza a los jugadores.

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