Galicia tiene más árboles senlleiras de las que figuran en su catálogo

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

A MEZQUITA

cedida

Una tesis propone incluir en ese documento de la Consellería de Medio Ambiente  42 nuevos ejemplares y 16 formaciones

08 jul 2020 . Actualizado a las 22:11 h.

Existe un árbol en Santigoso, en el municipio de A Mezquita, al que los vecinos llaman carballo y que mide 28,10 metros de altura. Este ejemplar, que en realidad es un cerquiño (Quercus pyrenaica o rebollo en castellano), podría estar entre los más altos de su especie en Galicia. Sin embargo, no figura ni siquiera en el catálogo de Árbores Senlleiras. No es el único patrimonio verde que debería contar con algún tipo de reconocimiento oficial, asegura José Gaspar Bernárdez Villegas, investigador de la Universidad de Santiago de Compostela y graduado en Enxeñería Forestal e do Medio Natural con máster en Arquitectura da Paisaxe Juana de Vega, que acaba de presentar una tesis en la que revisa la situación de los árboles más destacados de la comunidad y concluye que otros 42 ejemplares y 16 formaciones deberían figurar también en ese catálogo elaborado por la Consellería do Medio Ambiente.

Tampoco se incluye en ese documento un eucalipto robusto que hay en Marín, de más de 46 metros de altura y que podría estar considerado uno de los más altos del mundo. «Son árbores que pasan desapercibidos. Levo catorce anos mirando árbores e sigo atopando exemplares que poderían ser únicos. E se hai eses, significa que ten que haber máis», asegura Bernárdez Villegas. Su trabajo, realizado bajo la dirección de los catedráticos Rosa Mosquera y Antonio Rigueiro y que acaba de ser presentado en la Escola Politécnica Superior de Enxeñería del campus de Lugo, incluyó la revisión y estudio de 1.108 ejemplares y formaciones que están repartidos por toda Galicia. De cada uno de ellos elaboró una ficha individualizada en la que se incluye su descripción, así como otra del entorno con datos históricos o curiosidades, además de una breve descripción botánica. De todos estos ejemplares, 189 forman parte del catálogo actual, otros 58 figuran como nuevas propuestas y 861 referencias más formarán parte de la mayor base de datos creada sobre el patrimonio natural gallego hasta ahora.

MARTINA MISER

«O catálogo naceu con moi boa intención, pero arrastra cuestións coma a falta dun criterio homoxéneo para diferenciar ente árbores e formacións», explica el investigador. Su tesis permitirá ahora corregir todos los errores que existen, como «a actualización dalgún nome científico ou do rexistro, porque hai árbores catalogadas coma unha e que, en realidade, son quince», explica. Al mismo tiempo, ha presentado una propuesta para incluir nuevos ejemplares en el catálogo, concretamente 42 y otras 16 formaciones. «Algúns deles son exemplares únicos en Galicia e incluso en Europa ou a escala global. Son árbores que, nalgúns casos, teñen máis de 300 anos e dos que non me podo atribuír o seu descubrimento, porque xa estaban aí. Pero é que nin sequera están catalogados», añade. De ellos, la mayoría se ubican en la provincia de Pontevedra. Según su tesis, ahí hay 31 que deberían contar con algún tipo de protección. Otros 14 están en la provincia de Ourense, mientras que en Lugo hay nueve y en A Coruña tres. Por especies, la más habitual es el castaño, con cuatro ejemplares propuestos para ser incluidos en el catálogo, seguido de los cedros do Atlas y la camelia (3 ejemplares), el ciprés de Lawson, el arce, el magnolio, el plátano de sombra, el abeto de Douglas y el roble. Bernárdez Villegas también sugiere en su tesis que el 5,3 % de los ejemplares senlleiros deberían ser descatalogados por haber sufrido una muerte biológica.