Los vecinos y el cura de Pazos de Arenteiro recogieron las imágenes del interior por precaución
30 oct 2023 . Actualizado a las 18:31 h.Los vecinos de Pazos de Arenteiro, en el concello ourensano de Boborás, se llevaron un gran disgusto este lunes. A primera hora de la mañana comprobaron que una parte del muro exterior de la capilla de San Roque se había derrumbado. Enseguida alertaron al cura y a la alcaldesa , Patricia Torres, que se desplazaron hasta el lugar para comprobar el estado de la ermita, de origen medieval. Aunque los daños son exteriores, se apuntaló la estructura. Se cree que una filtración de agua pudo estar detrás de la caída de las piedras y se teme que el interior esté afectado.
El cura, Carlos Arce, explicaba este lunes que hay que agradecer que no se produjeran daños personales. Señala que es una ermita muy vistada y querida por los fieles. «En cuanto nos enteramos fuimos hasta allí. Primero retiramos todos los santos y dejamos que entrasen los técnicos para poder apuntalar el interior para que no ceda el resto», relató el sacerdote. «Sobre todo en el mes de agosto hay mucha afluencia de gente a la ermita, en donde celebramos una misa por san Roque. Es de mucho valor para los vecinos y para aquellos que están fuera, para los emigrantes que siempre regresan para estas fiestas», añade.
La alcaldesa de Boborás, Patricia Torres, señaló que el Concello apuntaló la estructura y perimetró la zona por motivos de seguridad, para evitar más derrumbes. La regidora subrayó que junto con el sacerdote buscará la financiación necesaria para poder rehabilitar este elemento patrimonial de Pazos de Arenteiro.