La declaración de Errejón en el juzgado: «Si yo hubiera visto malestar por su parte no le propongo que se vaya a mi casa»
ESPAÑA
«No le denuncié antes por miedo», explica Elisa Mouliaá en el vídeo de su interrogatorio
20 ene 2025 . Actualizado a las 18:01 h.El exdiputado de Sumar Íñigo Errejón declaró el pasado 16 de enero, ante el juez que le investiga por un presunto delito de agresión sexual a la actriz Elisa Mouliaá, que lo que ella denunció ocurrió con consentimiento por su parte. «Si yo hubiera visto como algún malestar por su parte, o en el bar, o en el taxi, o en el ascensor, o en la fiesta, o en la habitación, no le propongo que se vaya a mi casa», señaló.
Así consta en el vídeo de su interrogatorio, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que se aprecia cómo declara durante 36 minutos en la sede del Juzgado de Instrucción Número 47 de Madrid.
Durante su declaración, el magistrado le preguntó por qué dimitió de sus cargos políticos si no hubo agresión por su parte. Errejón le respondió que dejó la política no por los hechos denunciados, sino porque había perdido la confianza de su partido y que por la idiosincrasia de su espacio político era incoherente seguir en el cargo.
«Yo pierdo la confianza de mis dirigentes y cuando uno es político, cuando pierde la confianza de sus jefes, se tiene que ir. (...) Yo militaba en un espacio político que tiene a gala defender que cualquier testimonio, aunque sea anónimo y aunque sea en redes, es plena y directamente válido (...) Yo no puedo ser portavoz de un espacio así y a la vez defender mi inocencia; entonces yo tengo que dar un paso atrás, y doy un paso atrás», explicó.
El exdiputado hizo un repaso de las conversaciones que mantuvo por redes sociales y chats de mensajería instantánea con Mouliaá antes de conocerse en persona. También relató detalles de la fiesta a la que asistieron juntos en septiembre del 2021, donde habría tenido lugar la agresión sexual denunciada por la actriz.
Preguntado por la Fiscalía sobre si aquel día Mouliaá le dijo en algún momento que estaba yendo «demasiado rápido», Errejón dijo que no. Durante el interrogatorio, la fiscal se detuvo en el episodio de la habitación recogido en la denuncia. «¿Ella ahí no le dijo que se sentía incómoda incluso con la luz?», preguntó. A lo que respondió: «Ni con la luz ni con nada».
«¿Le dijo en algún momento que a las mujeres hay que tratarlas de otra manera? ¿Que hay que ponerlas cómodas?», insistió la representante del ministerio público. «Ni en la habitación, ni cuando luego nos fuimos a mi casa. Si yo hubiera visto, como algún malestar por su parte, o en el bar, o en el taxi, o en el ascensor, o en la fiesta, o en la habitación, no le propongo que se vaya a mi casa», contestó Errejón.
El juez: «¿Lo del 'solo sí es sí es fabulación?»
El magistrado continuó el interrogatorio en la misma línea: «Usted es todavía un hombre público, un hombre político. Si usted hubiera notado una mínima queja de ella o deseo de no continuar o tal, ¿hubiera continuado usted con ella?», le preguntó.
«De hecho, la prueba es que la única vez que dice, 'oye, me voy a ir, estoy muy agobiada con mi hija', se va», respondió el que fuera líder de Más País. En este momento, el magistrado le preguntó si «paró» cuando Mouliaá le recordó la Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual con la frase de «solo sí es sí».
Según consta en el vídeo de la declaración, Errejón contestó: «En la vida real la gente no habla así. Lo que me dijo es 'estoy agobiada por mi hija y me quiero marchar'». Ante su respuesta, el magistrado le preguntó entonces si lo de «solo sí es sí» era una «fabulación». «La razón que le digo es que estaba agobiada por su hija, al final es más que comprensible», añadió el exdiputado.
A preguntas de la abogada de la actriz, Errejón negó que ella se hubiese resistido aquella noche. «Entiendo, por lo que usted ha contado aquí, que ella en ningún momento de la noche, en ninguno de estos escenarios que ella describe, ni le empujó, ni le separó, para impedir que usted se le acercara», señaló la letrada. El exdiputado insistió: «Ella nunca hizo eso».
Errejón reiteró que todo lo sucedido aquel día fue consensuado y negó presiones o agresión alguna. «Yo no lo hago. No soy una mala persona, pero además... Joder, soy una persona pública», agregó.
Durante la comparecencia, el instructor también preguntó al exdiputado si vio a Mouliaá «muy ebria» la noche de la fiesta. Errejón contestó que no, que ni siquiera habían tomado dos cervezas.
Chats con «tonteo subido de tono»
Preguntado por la Fiscalía sobre si en las conversaciones previas que mantuvo con Mouliaá «en algún momento hablan explícitamente de mantener relaciones sexuales», Errejón explicó que no hubo un acuerdo expreso ni un «contrato».
«No decimos: 'Quedamos el día tal a tenerlas'. Pero estamos hablando de lo que nos apetecería hacer cuando nos veamos. Sí son, digamos, lo que empieza siendo un tonteo, acaba siendo un tonteo muy subido de tono», apuntó.
En el marco del interrogatorio, el juez Adolfo Carretero intervino para pedir concreción al exdirigente. «¿Podría concretar usted un poco eso que he dicho antes. Porque es que claro, aquí en la justicia penal no hay que ser tan metafórico», señaló. A lo que Errejón contestó; «Sí, pues hablar básicamente de cómo vas a follar con otras personas. Perdonen».
En este punto, Errejón precisó que tenía extractos de varias de las comunicaciones de Instagram. «Yo tengo todo hasta el día de los hechos denunciados. A partir de ahí ella borra su mitad, que puede borrar, pero la mía no la puede borrar, así que la mía la tengo. También tenemos el peritaje que demuestra que ya lo borró, y que lo borró en posterioridad a la denuncia», explicó.
Durante la declaración, la defensa de Mouliaá apuntó que la actriz había declarado que no conservaba las conversaciones de Instagram porque Errejón las había borrado. El exdiputado lo negó. «No, eso es que no es verdad, que es ridículo. Si yo la tengo, vamos, la tengo en el teléfono, la tenemos ante notario, la vamos a dar», señaló.
El exdiputado recalcó que después de aquel día volvió a intercambiar mensajes con Mouliaá hasta abril del 2023. «Ya le digo que una semana después me invita a un concierto, bueno, me invita, no me invita (...) Que qué pena que nos lo hayamos perdido», agregó.
El magistrado terminó el interrogatorio preguntando: «Entonces, para terminar, según usted, ¿la denuncia es falsa desde el principio hasta el final?». Errejón contesta de forma afirmativa.
Mouliaá: «El paró porque yo me zafé»
La actriz Elisa Mouliaá aseguró el pasado jueves en su declaración ante el juez que investiga a Íñigo Errejón por un delito de agresión sexual que el exdiputado actuó de forma «fría» y que si tardó en denunciar fue «por miedo». «El paró porque yo me zafé», aclaró.
Durante su declaración del pasado 16 de enero, a la que ha tenido acceso Europa Press, la artista respondió a las preguntas del magistrado Adolfo Carretero, que cuestionó en numerosas ocasiones la versión ofrecida por Mouliaá de lo ocurrido la noche de septiembre del 2021 en la que presuntamente se produjeron los hechos.
La actriz explicó que todo comenzó cuando el entonces dirigente la invitó a la presentación de su libro después de un año hablando por redes sociales. Después de la misma, ambos se fueron a tomar una cerveza a un bar cercano. Ella, que ha dicho que ya empezó a sentirse incómoda, le explicó entonces a Errejón que tenía que marcharse a una fiesta en casa de un amigo suyo, plan al que el político se unió.
En el taxi de camino, Errejón le habría impuesto una serie de condiciones que el juez calificó de «ridículas». «¿Usted es una persona acostumbrada al público, no fue capaz de decirle que las condiciones (que Errejón supuestamente le impuso) no eran aceptables?», cuestionó el juez, que le inquirió repetidas veces que por qué no le pidió que parase.
«Lo interpreté como una manera de bromear, como de saltarse diez pasos de una manera bastante torpe, lo quise pasar por alto», le aclaró la actriz, que continuó con el relato. Tras bajarse del taxi, llegaron al ascensor, donde Errejón la habría besado de forma violenta.
Poner algo en la copa
Cuando llegaron a la fiesta, ambos bailaron y bebieron. «Acababa de dar a luz hacía un año y pico y no bebía mucho. Para mí, bebí bastante. Él me dio dos copas», explicó Mouliaá, que deslizó la posibilidad de que el político le echase algo en las bebidas: «Lo de mi ebriedad... no sé, me he llegado a plantear si me llegó a poner algo en la copa, porque nunca me había sentido así».
El juez llegó en ese punto a reprochar a Mouliaá que no incluyese en la denuncia que esa noche estaba muy borracha. «Recuerdo que estaba muchísimo más ebria de lo normal, me daba vueltas todo, tengo lagunas», le explicó la actriz. «Usted en la denuncia no lo dijo. ¿Estaba muy ebria seguro?», repreguntó el juez.
En esa fiesta, en la que habría cerca de «12 personas», ocurrió el siguiente incidente. Cuando un amigo de Mouliaá, Fernando, puso una canción del grupo Los Secretos, ambos empezaron a bailar. En ese momento, Errejón la habría agarrado del brazo para llevarle a una habitación.
«Ellos pensaban que era mi ligue», aclaró Mouliaá al ser preguntada sobre la razón por la que sus amigos no intervinieron. «¿Pero usted dijo algo para que ellos lo pensasen?», le interpeló el juez Carretero.
Ya en la habitación, en la que había una «luz blanca», Errejón «se cercioró» de que la puerta «estuviera cerrada». La actriz reconoció ante el juez que ella no se fijó en «si había pestillo», pero el político hizo «un amago» de que este existía.
Se sacó el pene
«Cuando me empuja contra la pared le intento quitar porque me estaba resultando muy incómodo», explicó la actriz. «¿Pero le dijo que parara?», preguntó el juez, a lo que Mouliaá aclaró que le dijo que «estaba incómoda». «No, muy incómoda no. Decir 'que me dejes en paz, que no me toques'. ¿Le dijo algo de eso?», repreguntó el magistrado.
En ese punto, y haciendo repaso de la denuncia, el juez Carretero cuestionó a la actriz: «(Errejón) se sacó el miembro viril. ¿Sabe usted para qué?». «Supongo que para violentarme», aclaró ella. «¿Pero le intentó bajar a usted las bragas? ¿Cuánto tiempo le estuvo chupando las tetas?», le preguntó el magistrado. La denunciante aseguró que a ella se le «hizo eterno» y que le pidió «que parara, que a una mujer se le pone cómoda» y que se estaba sintiendo «violentada». «Él paró porque yo me zafé», añadió.
«Pero señora, si ese señor la tenía en la cama con la puerta cerrada y a él encima... ¿Cómo se levanta y se va? ¿Forcejeó con él?», la interrogó el juez, a lo que Mouliaá contestó de forma afirmativa.
Tras abandonar la habitación, ambos decidieron marcharse de la fiesta con destino a casa de Errejón. «Usted ha sido objeto no ya de un beso, tocamientos a la fuerza. No se entiende que continúe con este señor o no le diga algo», le reprochó el juez. «Yo tampoco lo entiendo», reconoció Mouliaá.
Ambos subieron a un coche, cuando ella recibió una llamada de su padre en la que le informaba de que su hija tenía fiebre alta. «Me sacó bastante del estado en el que estaba. Él estaba al lado del taxista y no dijo absolutamente nada», apuntó.
«¿Y por qué no dijo lo siento no puedo ir a la casa porque tengo que ir con mi hija», inquirió el juez. Mouliaá sostuvo que le dijo a Errejón que se tenía que ir, pero que él insistió en que quería darle su libro firmado. Ambos subieron, y el político se habría «abalanzado» sobre ella nuevamente.
«Yo estaba en shock. Estaba muy borracha», insistió Mouliaá. «¿Había fumado usted alguna droga? ¿No había comido?», le repreguntó el juez. Después de que Errejón insistiera en mantener relaciones, ella se puso «mucho peor que en la fiesta» y le dijo que se estaba «sintiendo muy invadida».
«Lo paré yo. Al final le dije "tío, solo sí es sí". Parece mentira que me esté pasando esto contigo, no me entra en la cabeza, voy a pedirme un taxi», indicó la actriz. «Me impuse, yo creo que él se asustó, nos alejamos y me fui a pedir un taxi. Recuerdo estar los dos mirando al infinito, se me hizo eterno», añadió.