Condenado por intentar estrellar su coche contra un bar en las fiestas de Parada de Sil: «Había gente llorando»

Marta Vázquez Fernández
M. Vázquez OURENSE / LA VOZ

PARADA DE SIL

El acusado de conducción temeraria durante una verbena en Parada de Sil.
El acusado de conducción temeraria durante una verbena en Parada de Sil. Miguel Villar

La magistrada impone al conductor seis meses de cárcel y le quita el permiso de conducir durante dos años

21 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Las excusas que planteó durante el juicio un hombre acusado de haber cometido un delito de conducción temeraria, acusado de haber intentado estrellar su coche contra la terraza de un bar de Parada de Sil, no le han servido de nada. La magistrada encargada de ver este caso le ha impuesto al conductor, de 31 años, una condena de seis meses de cárcel, por considerar probado que con su conducta puso en riesgo la integridad de las personas que en la madrugada del 28 de agosto del 2020 disfrutaban de las fiestas patronales. En base a lo que declararon varios testigos en la sala de vistas, la magistrada entiende que aquella fiesta pudo finalizar en una tragedia.

Y es que tras haber sido expulsado del bar Casa Mercedes, por fumar dentro y montar jaleo al golpear unas papeleras, el acusado mostró su peor cara. Se fue hacia su coche, que estaba aparcado en las inmediaciones, y se subió. Sin dudarlo, arrancó y condujo a toda velocidad hacia la terraza del bar, frenando cuando ya había derribado algunas mesas y rebasado la acera. «La gente estaba en pánico», aseguró uno de los testigos. Y es que los lugareños, al ver venir el vehículo a toda velocidad, se levantaron de la terraza a toda prisa para escapar. Mientras, otros de los presentes que estaban en la verbena corrieron hacia el turismo y empezaron a dar golpes en la parte de delante, para intentar que el conductor parara. Cuando lo hizo, lo intentaron sacar del coche, pero este volvió a cerrar la puerta y aceleró, esta vez marcha atrás. Con esta maniobra arrolló a uno de los vecinos, pasando con una rueda por encima de su pie.

«Los testigos fueron claros y rotundos a la hora de señalar que el acusado metió el coche casi en el interior del local», asegura la togada, que ve probada la situación de peligro por las aseveraciones que hicieron algunos de los allí presentes. «Había gente llorando», explicó una mujer, mientras que otro de los vecinos relató que tuvo que «tirar de su novia» para que el coche no la golpeara. Así las cosas, le impone al conductor, Iago P. V., una pena de seis meses de cárcel y la privación para conducir durante dos años.