El dueño del animal, que se escapó el domingo de su casa, donde vive con otro ejemplar, asegura que es inofensivo
23 sep 2023 . Actualizado a las 13:18 h.El municipio ourensano de Beade recibió esta semana una visita especial. Algunos vecinos vieron a un lobo pasearse por los alrededores de la única tienda de alimentación que hay en el concello. Fue en la madrugada del jueves y desde entonces este animal es la comidilla del pueblo. Mientras muchos creían que se trataba de una exageración y aseguraban que era un perro, otros tenían miedo de que regresase y se acercarse a las casas. El misterio está resuelto porque el lobo, que es lo que es, tiene dueño, microchip y toda su documentación en regla. Se llama Lobo y se escapó de su casa, en Punxín, el pasado domingo. «É un animal completamente domesticado, criado con humanos dende pequeniño. Ten dous anos e tres meses», explica su dueño, Francisco Javier Soto. «Era dun amigo que o criou en Madrid, pero tivo que mudarse a Canarias así que quedou comigo. Levaba na casa dous días e escapou. Eu estaba convencido de que volvería porque aquí ten a comida, pero non», añade.
El vecino de Punxín lleva buscando a su animal desde que se escapó. Por las noches, cuando es más fácil verlo por la carretera o las cercanías de los montes, hace batidas con amigos para encontrarlo. La última fue por Pena Corneira. «En canto vin a foto no xornal recoñecín a Lobo», cuenta. Fue al supermercado de Beade y pidió más datos, pero nada. «É un animal moi dócil e inofensivo, pero moi activo así que debe levar moitísimos quilómetros recorridos. Xa o viron tamén por San Amaro. Eu non me vou cansar de buscalo porque ten que estar moi canso e famélico», continúa.
Aunque es natural de Punxín, Soto llevaba muchos años fuera, en Suiza. Regresó a Galicia hace unos meses y se instaló en Sandiás mientras encontraba una casa y un terreno para comprar en su pueblo natal. Lo consiguió y volvió a Punxín hace solo dos semanas. Allí vive con su chica, Sandra, y con sus animales. Tiene conejos, aves y gatos, entre otros. «Recollemos aos animais que nos atopamos abandonados ou feridos», aclara y admite que su referente es Félix Rodríguez de la Fuente. El lobo desaparecido no es el único que tiene. Cuida a otro que se llama Ragnar, por el personaje de la serie Vikingos. Este tiene nueve meses, es un cachorro, y también tiene chip y cartilla en orden, como su compañero perdido. «É un híbrido de raza ártico, americano e ibérico. Criámolo dende que naceu e é coma un can», afirma. El animal es cariñoso, tranquilo y responde a todas las órdenes que le dan Francisco y Sandra. Aúlla casi todo el día. «O que se perdeu tamén ouvea. Ten o pelo escuro, é flaco e moi inquedo, pero nada agresivo. Se alguén se lle achega, ten medo e sae correndo», explica el vecino de Punxín, que ruega a quien lo vea que le escriba a través de las redes sociales para poder encontrarlo cuanto antes.