El lobo que se paseó por Beade es de Punxín y tiene microchip

María Doallo Freire
M. Doallo OURENSE

PUNXÍN

Miguel Villar

El dueño del animal, que se escapó el domingo de su casa, donde vive con otro ejemplar,  asegura que es inofensivo

23 sep 2023 . Actualizado a las 13:18 h.

El municipio ourensano de Beade recibió esta semana una visita especial. Algunos vecinos vieron a un lobo pasearse por los alrededores de la única tienda de alimentación que hay en el concello. Fue en la madrugada del jueves y desde entonces este animal es la comidilla del pueblo. Mientras muchos creían que se trataba de una exageración y aseguraban que era un perro, otros tenían miedo de que regresase y se acercarse a las casas. El misterio está resuelto porque el lobo, que es lo que es, tiene dueño, microchip y toda su documentación en regla. Se llama Lobo y se escapó de su casa, en Punxín, el pasado domingo. «É un animal completamente domesticado, criado con humanos dende pequeniño. Ten dous anos e tres meses», explica su dueño, Francisco Javier Soto. «Era dun amigo que o criou en Madrid, pero tivo que mudarse a Canarias así que quedou comigo. Levaba na casa dous días e escapou. Eu estaba convencido de que volvería porque aquí ten a comida, pero non», añade.

El vecino de Punxín lleva buscando a su animal desde que se escapó. Por las noches, cuando es más fácil verlo por la carretera o las cercanías de los montes, hace batidas con amigos para encontrarlo. La última fue por Pena Corneira. «En canto vin a foto no xornal recoñecín a Lobo», cuenta. Fue al supermercado de Beade y pidió más datos, pero nada. «É un animal moi dócil e inofensivo, pero moi activo así que debe levar moitísimos quilómetros recorridos. Xa o viron tamén por San Amaro. Eu non me vou cansar de buscalo porque ten que estar moi canso e famélico», continúa.

El lobo perdido en Punxín
El lobo perdido en Punxín

Aunque es natural de Punxín, Soto llevaba muchos años fuera, en Suiza. Regresó a Galicia hace unos meses y se instaló en Sandiás mientras encontraba una casa y un terreno para comprar en su pueblo natal. Lo consiguió y volvió a Punxín hace solo dos semanas. Allí vive con su chica, Sandra, y con sus animales. Tiene conejos, aves y gatos, entre otros. «Recollemos aos animais que nos atopamos abandonados ou feridos», aclara y admite que su referente es Félix Rodríguez de la Fuente. El lobo desaparecido no es el único que tiene. Cuida a otro que se llama Ragnar, por el personaje de la serie Vikingos. Este tiene nueve meses, es un cachorro, y también tiene chip y cartilla en orden, como su compañero perdido. «É un híbrido de raza ártico, americano e ibérico. Criámolo dende que naceu e é coma un can», afirma. El animal es cariñoso, tranquilo y responde a todas las órdenes que le dan Francisco y Sandra. Aúlla casi todo el día. «O que se perdeu tamén ouvea. Ten o pelo escuro, é flaco e moi inquedo, pero nada agresivo. Se alguén se lle achega, ten medo e sae correndo», explica el vecino de Punxín, que ruega a quien lo vea que le escriba a través de las redes sociales para poder encontrarlo cuanto antes.