Dos días de luto oficial en Taboadela, el municipio de Ourense donde murieron tres personas de la misma familia durante el apagón eléctrico
TABOADELA

El cementerio de Santa Mariña acogió este miércoles el funeral en memoria de Francisco Dacal, Antonia Fernández y Francisco José Dacal
30 abr 2025 . Actualizado a las 20:10 h.A pesar de todos los inconvenientes y problemas generados por el corte de suministro del lunes a nivel peninsular nadie podía imaginarse que Ourense regresaría a la normalidad con la tristeza de tener que llorar a tres muertos de la misma familia. Este miércoles, a partir de las cinco y media, se celebrará en el tanatorio del cementerio de Santa Mariña el funeral en memoria de Francisco Dacal (81); su mujer, Antonia Fernández (77); y el hijo de ambos, Francisco José Dacal (56), al que los vecinos de Taboadela, donde los tres residían, llamaban cariñosamente Francisquito. Los tres murieron tras el apagón eléctrico y, aunque todavía se están investigado las causas, todo apunta a la inhalación de los gases del generador que instalaron para sortear la falta de suministro y mantener encendido el respirador que necesitaba el cabeza de familia. Lo instalaron en la planta baja de la vivienda, pero quedó abierta la puerta que daba acceso a los dormitorios donde descansaban. Poco a poco el monóxido de carbono se fue colando -se detectaron altos niveles en la vivienda cuando se inició la investigación- y perdieron la vida.
Fue la trabajadora social del Concello de Taboadela la que dio la señal de alarma, al ver que no le abrían la puerta. Llamó al teniente de alcalde y este alertó a la Guardia Civil. Ya no se pudo hacer nada.
Francisco Dacal padecía un cáncer que lo había llevado al hospital recientemente y necesitaba un respirador. Había trabajado como electricista y también había ejercido como juez de paz en Taboadela. Su mujer, Antonia, se dedicó a la casa, pero sobre todo al cuidado de su hijo, que tenía una discapacidad. Dicen los vecinos que a este último le encantaba dibujar y que lo hacía muy bien.
El Concello de Taboadela, con el alcalde Álvaro Vila a frente, decretó dos días de luto oficial en recuerdo de una familia que era muy querida en el pueblo. Sus restos mortales serán enterrados este jueves en Vilar de Santos.