Pablo Alfaro entrena en deportividad e ilusión a los escolares

María Conde maria.conde@lavoz.es

PONTEVEDRA

04 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

¿Quién va a jugar en lugar del sancionado Charles? ¿Será Gerardo? Quienes interrogaban ayer a Pablo Alfaro con estas cuestiones no eran los habituales periodistas deportivos, sino los alumnos de la Institución Educativa SEK, entusiasmados con contar con la presencia del entrenador del Pontevedra CF en el centro. Algo más de una hora compartió el técnico con cerca de cuatrocientos estudiantes, que no dejaron de levantar la mano para preguntarle por el vital partido contra el Alcorcón, pero también por muchos otros detalles de su vida deportiva. Alfaro no dio un pronóstico sobre el encuentro del domingo, aunque se mostró convencido de la victoria, teniendo en cuenta que el Pontevedra ha marcado en dieciséis de los veinte partidos jugados fuera de casa. Pero sí pidió apuestas a los chavales. ¡Y hubo quien se marcó hasta un 0-6! El entrenador fue más cauto y subrayó que espera que los granates marquen y mantengan la portería a cero. Sí recordó que si el Pontevedra logra ascender, hará el Camino a Santiago en bicicleta con Nino Mirón. Idea a la que se apuntaban ya ayer muchos voluntarios...

La diplomacia de Alfaro dejó huella. Por ejemplo cuando le preguntaron cuál consideraba mejor de sus jugadores, a lo que dijo que «todos son buenos». O cuando le sugirieron si querría a Messi o Cristiano Ronaldo en su equipo, a lo que reiteró que sus jugadores son estupendos. También alentó a los alumnos recordándoles que se puede ser buen estudiante y hacer deporte, «y se puede ser buen deportista y estudiar», aludiendo a su ejemplo como licenciado en Medicina.

La ciudad también se llevó sus cumplidos. El técnico destacó la gran afición del Pontevedra y se mostró encantado con el cariño que le dispensan los aficionados, tras aludir también a la «gran ilusión» que ve por todas partes para el ansiado ascenso. No había más que ver la primera fila de pequeños espectadores, con su bufanda granate.

Y es que en estos últimos días parece que no hay rincón que no esté teñido de este color. Las banderolas llenan muchos lugares de la zona monumental, como por ejemplo la calle Real. Incluso las usuarias de la plaza de abastos han adornado muchos puestos con los colores del club pontevedrés. En un pub de la calle Javier Puig también se han esmerado en preparar a un hincha granate para crear ambiente de cara al partido. A este aficionado no le falta detalle... Gorro, gafas, bufanda, camiseta y banderola... Bueno sí, uno. Solo lleva calzado en uno de sus pies. Habrá que ver el lunes si conserva su zapatilla en caso de victoria...