Alfaro: «Espero que sea un hasta luego y vuelva a entrenar al Pontevedra»

Pablo Alfaro se despidió ayer del Pontevedra. El técnico aseguró marcharse triste por no haber consumado el sueño del ascenso con el conjunto granate, pero a la vez ilusionado ante la gran oportunidad que se le ha presentado de entrenar a un histórico como el Recreativo de Huelva. Espera que se salida del club no sea un adiós sino un hasta luego.

«De esta etapa me quedo con todo. Hemos sido capaces de disfrutar mucho, sobre todo en la recta final, de conseguir que la afición del Pontevedra se haya sentido orgulloso de su equipo y de sus jugadores y de que esa llama no decaiga, que es lo más importante para el club. Esa es la satisfacción con la que me voy», explica el preparador.

«Ojalá sea un hasta luego porque ha sido un placer estar aquí. Eso ya se lo he dicho al presi. El trato que he recibido de mis jugadores, del club, los periodistas y la afición ha sido exquisito. La verdad es que deseo que nuestros caminos se vuelvan a cruzar, y si es más arriba, mucho mejor», añade.

En cualquier caso reconoce que se va con una espina clavada. «Sin duda alguna al Onteniente se le clavó este domingo la misma espina que tenemos nosotros. Es esa sensación de que prácticamente has llegado hasta la orilla remando y te has quedado muy cerquita de la tierra. Con el paso de los días habrá que ir pensando en hacer nuevo proyecto, con esa masa social que tiene, para tirar hacia arriba y llevar al Pontevedra al lugar que le corresponde», destaca.

E insiste en que «me voy con la sensación de que la tarea ha quedado a medio hacer. Ojalá, ojalá que nuestros caminos se vuelvan a cruzar porque estaría encantado de volver a esta ciudad para entrenar».

Gigante con pies de barro

El aragonés tiene claro que es lo que falló. A su juicio, la pérdida del ascenso estuvo «motivada por muchas situaciones como el hecho de que no tuviéramos unas instalaciones en condiciones para entrenar y nos viéramos obligados a peregrinar durante mes y medio por los municipios de la provincia o no haber podido contar con un césped en condiciones hasta el final de la liga».

Y aclara que «la gente se queda con las imágenes del final, del play off , pero esas cosas influyen mucho. El Pontevedra tendrá muchas posibilidades de dar el salto y de mantenerse ahí si mejora estos aspectos; y está en el camino de hacerlo. De esa forma asentará bases más sólidas».

No olvidó a los árbitros

Alfaro volvió a referirse a las polémicas actuaciones arbitrales que sufrió el equipo en la promoción. «Fue algo muy extraño. Me sorprendió mucho el buen nivel y la eficacia del arbitraje en Segunda B durante la fase regular, con gente muy joven dispuesta a comerse el mundo. Pero esa sensación me desapareció en el play off . Los mejores equipos da la categoría hemos tenido los árbitros más malos. En Oviedo sufrimos el acoso, en Alcorcón todo el mundo pudo ver lo que ocurrió y el míster del Onteniente también ha realizado declaraciones muy agresivas...»

Y sentencia que «es incomprensible que un profesional como un árbitro pueda jugar con la ilusión de tanta gente. Es indemostrable que hubiera mala intención, pero he visto movimientos muy extraños. Era inevitable pensar que pudo haber alguna mano negra».

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