El buen tiempo propició una mayor afluencia de público
27 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Salgueiros puso el broche de oro al Entroido do Ulla. La simbiosis entre los elementos tradicionales que son seña de identidad en el carnaval de esta parroquia cruceña y el buen tiempo propició que el público siga incrementando su respaldo a esta cita que cerró el calendario de 26 representaciones donde los Xenerais son protagonistas.
Un correo y siete Xenerais recorrieron ayer Salgueiros, para terminar con un Alto en el que no combaten sino que cada uno hace una sátira principalmente política. El combate y las pullas más picantes llegan con los mouros y los vellos, este año más numerosos al faltar la parranda. Los problemas con los lindes de las fincas no faltaron en sus versos. Y para culminar, el frade y el alcalde.
Pero antes, los vecinos, que se vuelcan con los disfraces, también ya habían realizado su propia sátira, con la escenificación de los problemas de la sanidad. Incluso volvió a encallar, el Costa Concordia, esta vez en una finca de Salgueiros. Para finalizar, uno de los momentos más aguardados por el más de millar de asistentes: el encierro. La becerra saltó al ruedo para correr tras siete toreros.
Este año el Entroido da Ulla, tanto los municipios de A Estrada, Silleda y Cruces, como los limítrofes de A Coruña, decidieron unir esfuerzos en torno a su entroido tradicional. La meta: lograr la declaración de interés turístico.