Del papel a la tableta digital

Marcos Gago Otero
marcos gago MARÍN / LA VOZ

PONTEVEDRA

Diego Rosales enseña el escritorio de una de las tabletas que usarán los alumnos el próximo curso.
Diego Rosales enseña el escritorio de una de las tabletas que usarán los alumnos el próximo curso. r. leiro< / span>

Ciento cincuenta alumnos de ESO del San Narciso de Marín innovan en septiembre con un sistema propio de libros electrónicos en las aulas

23 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Una tableta a prueba de golpes y caídas, con todos los libros de texto de cada curso de la ESO incorporados y con varias aplicaciones exclusivas convertirá en residual la presencia del papel en el colegio San Narciso de Marín el próximo septiembre. La iniciativa, impulsada por la Fundación Junior?s, actuales gestores del centro educativo, supondrá toda una revolución en las aulas y coloca al centro marinense como el primero de la provincia en decir adiós al clásico libro de toda la vida. De hecho, solo hay otro en Galicia con este sistema, en Santiago.

A partir de ahora, las nuevas tecnologías impondrán un nuevo ritmo lectivo en las aulas y una concepción más interactiva de la enseñanza. Más de ciento cincuenta de los doscientos alumnos de Secundaria de este centro han accedido a la compra de las tabletas, mientras que los restantes cincuenta seguirán con el papel.

El gerente del San Narciso, Diego Rosales, sostiene que la puesta en marcha de la digitalización de las clases marcará también un importante ahorro a las familias. Cada tableta cuesta 299 euros, un coste que según Rosales es semejante al que supone la compra de los libros en papel de cada curso. A cambio de apuntarse a este modelo didáctico, el centro escolar ofrece gratuitas las licencias de los libros de texto del primer año, gracias a un acuerdo con las editoriales Vicens Vives, Planeta y Grupo Océano.

Para los siguientes cursos de la ESO, los padres solo tendrán que pagar por las licencias de los libros digitales, a algo menos de la mitad de precio de lo que cuestan los ejemplares en papel de estos mismos textos.

Por esta razón, Rosales cree que la comparación entre el sistema digital y el papel no tiene color y que supondrá al final del ciclo un ahorro de bastantes cientos de euros a los padres. En el desarrollo de este proyecto se ha tenido en cuenta el procesador Intel y la colaboración de la empresa Grammata. Para no tener que depender de Internet y los costes adicionales que esto supondría, el sistema didáctico es off line.

Las tabletas vienen provistas también de otras aplicaciones, como una enciclopedia cuaderno del alumno, una USB que puede conectarse con una estación meteorológica y una cámara trasera a la que se puede acoplar un microscopio.

El papel no desaparecerá del todo. Seguirá siendo el soporte de los exámenes y el método no tiene aún cabida en Primaria.