Con baja acidez y certificado de calidad, así será el aceite de Campañó
PONTEVEDRA
Arranca la plantación de plantación de 3.000 olivos en el monte de A Tomba, que se espera que sean productivos en un par de años
18 mar 2021 . Actualizado a las 17:12 h.Si todo marcha según lo previsto, en el plazo de un par de años la comunidad de montes de Campañó podría estar comercializando un producto cuya elaboración será novedosa en Pontevedra: aceite de oliva. Esta semana arrancó la plantación de algo más de tres mil ejemplares de olivos en las laderas del monte de A Tomba, una parte más del parque forestal que el Concello está creando en la zona. El parque forestal ocupará una superficie de 62 hectáreas, tendrá unos 17 kilómetros de sendas y en su creación se están plantando 25.000 árboles, una labor que seguirá hasta finales de año.
Alrededor de 3,5 hectáreas del parque estarán ocupadas por la plantación de olivos. Ayer estuvieron en la zona el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, el presidente de la comunidad de montes, Jose María Domínguez, y el presidente de la Asociación de Produtores de Aceite e Aceituna de Galicia, José Antonio García. La presencia de este último viene dada porque la asociación que preside asesorará a la comunidad de montes en todo el proceso de plantación y cuidados de los olivos, y en la elaboración futura del aceite.
García explicó que lo que se está plantando en A Tomba son ejemplares de dos variedades, arbequina y picual. El siguiente paso será injertar en los ejemplares plantados esquejes de las dos variedades de aceituna autóctona gallega reconocidas por el CSIC, la mansa y la brava. Es con esta combinación con la que cerca de doscientos productores de aceite en Galicia (la mayor parte en las provincias de Ourense, 85, y en la de Pontevedra, 78), llevan unos años sacando un producto que cuenta ya con su propio sello de garantía y trazabilidad.
El de Campañó también lo tendrá, ya que el cuidado de los árboles, la recogida (manual) y la elaboración de aceite seguirá los estándares implantados por la asociación gallega. José Antonio García destacó que en buenas condiciones, cada olivo puede llegar a producir hasta 30 kilos anuales, aunque la media se sitúa en unos 15. A partir de ahí, se calcula que para elaborar un litro de aceite se necesitan entre 7 y 10 kilos de aceituna, con lo que la producción de Campañó podría superar los 3.000 litros anuales. Actualmente, el aceite Alma Meiga, que es el que comercializa José Antonio García, se vende a un precio de 15 euros la botella de medio litro. El aceite que se produce en Galicia tiene una acidez muy baja, de unos 0,12 grados. A modo de comparación, para tener la calidad de «aceite de oliva virgen extra» se requiere una acidez máxima de 0,80. El experto cree que las condiciones en Campañó son ideales para que se den bien las olivas, y destacó que las 3,5 hectáreas dedicadas a su cultivo hacen de esta una de las mayores plantaciones de Galicia.
Lores aplaude la diversificación de usos del monte que acarrean los parques forestales
El alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, se mostró entusiasmado con la iniciativa de la comunidad de montes de Campañó de incluir una plantación de olivos en la recuperación de A Tomba. «Esta experiencia piloto parécenos interesantísima -indicó- porque vai no camiño de buscar alternativas para o sector primario, que está absolutamente desaproveitado, e para o monte, que maioritariamente está destinado a eucaliptos».
En este sentido, Lores remarcó que el plan de creación de parques forestales periurbanos -en O Pontillón, Xeve, A Fracha y A Tomba- supone una apuesta del Concello de Pontevedra «por un investimento nos montes porque pensamos que a longo prazo vai dar resultado, porque mellora a calidade de vida dos veciños, mellora o lecer, e tamén está abrindo camiños cara a novas actividades económicas que teñen moito que ver coas especies autóctonas, coa ecoloxía e coa calidade».
Sobre la plantación de olivos en Campañó que visitaba ayer, el regidor aplaudió la labor de la asociación de productores en el sentido de «buscar un sinal de identidade diferente e que estes produtos teñan un selo de calidade propios da Galicia».
En cuanto al parque de A Tomba, la inversión que acomete el Concello supera los 370.000 euros, y a pesar del parón en la plantación que supuso el confinamiento, la ejecución del proyecto apenas precisará una prórroga de un mes, hasta finales de enero del próximo año.
