La variante de Alba regresa a la agenda de la Xunta y del Concello de Pontevedra

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

La conselleira de Vivenda, María Martínez Allegue, muestra el colgante del convento de Santa Clara que le regaló el alcalde durante su visita al Concello de Pontevedra
La conselleira de Vivenda, María Martínez Allegue, muestra el colgante del convento de Santa Clara que le regaló el alcalde durante su visita al Concello de Pontevedra Ramón Leiro

Un permiso del Estado sobre el entronque del futuro vial con la N-550 es lo único que falta para retomar la tramitación de la vía

25 jun 2024 . Actualizado a las 19:08 h.

Cinco años después, la llamada variante de Alba sale del nuevo del cajón. Fue en el 2019 cuando la Xunta decidió enterrar el proyecto para construir una alternativa a la PO-225, el vial que comunica las carreteras de Vilagarcía y Santiago, una demanda del Concello de Pontevedra desde hace más de veinte años. La propia Administración autonómica había elegido un trazado que afectaba a las parroquias de Campañó y Lérez. El rechazo vecinal que generó acabó llevando pocos meses después a aparcar el proyecto hasta que hubiera consenso.

Ahora, una visita institucional de la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, al Concello confirmó que el proyecto, con aquel trazado elegido por la Xunta y para el que el Concello propuso en el 2021 un diseño alternativo que reducía considerablemente el impacto sobre el territorio, vuelve a estar sobre la mesa. Allegue anunció que el objetivo es «mellorar tanto o tránsito dos vehículos como dos peóns nesta contorna, acadando unha mobilidade segura e sustentable».

La condición que pone la Xunta es que el Concello obtenga del Ministerio de Transportes una autorización por escrito sobre el entronque del futuro vial con la N-550. En el otro extremo, en la PO-531, ya está prevista por la propia Administración autonómica la construcción de una rotonda en el marco del plan de mejora de la seguridad vial en la carretera de Vilagarcía.

Una vez que se obtenga la autorización de Fomento —algo que, según el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), está «apalabrado»— la Xunta iniciará «toda a tramitación necesaria para impulsar o vial», según anunció la conselleira. Así, partiendo del «deseño consensuado co Concello, levaranse a cabo o procedemento de avaliación ambiental correspondente e a aprobación do proxecto de trazado para continuar avanzando cara a execución das obras».

«Servirá para unir parroquias»

Lores se mostró «encantado» tras la reunión con Martínez Allegue, que se celebró en el Concello de Pontevedra. «Levamos moito tempo esperando pola variante de Alba», insistió, al tiempo que recordó que el proyecto servirá para «unir parroquias, non para separalas».

De hecho, el alcalde aludió a la carta que hace unas semanas firmaron ocho parroquias del norte del municipio demandando la construcción de esta infraestructura apelando a que ««ten vital importancia», ya que supondría una conexión con la zona costera de Poio así como hacia la vía rápida de O Salnés y la AP-9, «e tamén melloraría o acceso dos usuarios do centro de saúde de Lérez e do hospital Montecelo».

La pregunta que surge ahora es qué cambió para que la Xunta retome el proyecto. Lores lo tiene claro: «A conselleira». Esta no ocultó que ese posicionamiento vecinal influyó, pues «sempre buscamos máximo consenso para calquera actuación».

La futura variante de Alba en realidad discurrirá por las parroquias de Campañó y Lérez, ya que el trazado elegido en su día por la Axencia Galega de Infraestruturas conecta los lugares de O Freixo y A Cendona.

El diseño que propuso el Concello en el 2021 contemplaba un vial de unos 800 metros de longitud, con dos carriles y sendas peatonales y ciclistas. Además de las rotondas situadas en los entronques con la PO-531 y la N-550, se incluían dos glorietas más, que contribuirían tanto a calmar el tráfico como de conexión con los núcleos de la zona, así como ocho pasos de peatones sobreelevados (lombos). El trazado evitaba la demolición de viviendas, y el diseño planteado por el Concello rebajaba el coste estimado de 12,2 a 8,2 millones de euros. Ahora tocará revisarlo el precio, ya que es del 2021.

Acuerdos sobre vivienda y avances para desmantelar el parque de maquinaria

La recuperación de la variante de Alba fue la principal noticia que dejó la reunión celebrada este viernes entre el alcalde de Pontevedra y la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas. Pero no fue la única.

Ambos acordaron seguir avanzando en la construcción de vivienda protegida en el municipio, al margen de las siete parcelas que ofreció el Concello en el casco urbano y cuya viabilidad está siendo analizada por los técnicos del Instituto Galego de Vivenda e Solo. Este viernes se puso sobre la mesa la posibilidad de disponer de más bolsas de suelo para construir vivienda social, de protección oficial o incluso libre. La petición que hizo el alcalde, recogida con agrado por la conselleira, fue que esas bolsas no disten más de 1,5 kilómetros de A Peregrina, para seguir avanzando en la «cidade compacta».

Lores señaló que «hai distintas alternativas, desde unidades de actuación que están pendentes de desenvolver, até terreos en solo urbano consolidado ou non consolidado, terreos urbanizables, incluso hai terreos rústicos que cumprirían esa condición». Además, el alcalde subrayó que si esos desarrollos se hacen a través de «proxectos de infraestruturas de interese autonómico» estarían exentos de tasa municipal y de impuesto de obras.

Salir de A Xunqueira

Otra de las cuestiones abordadas es el traslado del parque de maquinaria de la Consellería en terrenos de dominio público marítimo-terrestre en la Xunqueira da Gándara. En este sentido, la intención de Martínez Allegue es seguir los pasos ya ejecutados por la Diputación —que trasladó sus instalaciones y recuperó el terrenos— y los que dará la Consellería de Medio Rural, que ya tiene previsto salir también de la Xunqueira. Desde Vivenda e Planificación de Infraestruturas se va a trabajar «no estudo de alternativas». Lores recordó que en la entrevista con el presidente de la Xunta, Alfonso Reda, el año pasado, este propuso asumir la búsqueda de esas ubicaciones alternativas — y el coste de regenerar los terrenos, a cambio de que el Concello asuma la titularidad de tres viales: la carretera vieja a Marín, la carretera de Lérez entre la Porta do Sol y el monasterio; y la de San Mauro, entre el cementerio y la rotonda hacia Ponte Caldelas.

Visita institucional, libro de honor y colgante de Santa Clara

 La reunión celebrada este viernes entre la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas y el alcalde de Pontevedra iba a tener lugar inicialmente en la sede la Xunta en Campolongo. Hace unos días, cuando ambos coincidieron en una visita a las obras de Montecelo, Lores propuso a Martínez Allegue convertir ese encuentro en una visita institucional al Concello. La invitación agradó a la conselleira, que es vecina de la ciudad del Lérez, y aceptó cambiar la agenda prevista.

Durante su comparecencia ante los medios tras la reunión, María Martínez Allegue se mostró emocionada por haber sido agasajada en su Concello, ya que fue una visita institucional con todas las de la ley. Fue recibida por el propio alcalde y tuvo la ocasión de firmar en el Libro de Honra de Pontevedra, donde escribió una cariñosa dedicatoria que ya queda para la posteridad: «Non teño palabras para expresar a enorme emoción que sinto ó escribir no libro de honra da miña cidade de Pontevedra, vila do Teucro, vila do Ravachol, vila que dá de beber a quen pasa, vila do hai que roelo. Non teñades dúbida de que sempre, en calquera condición, traballarei por e para esta a miña cidade, na que aínda temos moito por construír».

La conselleira fue agasajada por el alcalde con alguno de los libros editados por el Concello sobre la transformación urbana de la ciudad y con un colgante del convento de Santa Clara, que reproduce el enrejado de la sala de comunicaciones de las monjas de clausura. Se trata de un regalo que realiza el Concello en ocasiones especiales y fue diseñado por la Joyería Suárez. La titular de Vivenda e Planificación de Infraestruturas lució el colgante durante la rueda de prensa que ofreció con el alcalde.