7.000 árboles para recuperar la vegetación de ribera en las márgenes del Umia

Cristina Barral Diéguez
Cristina Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

CALDAS DE REIS

La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, este lunes, con el alcalde de Moraña, Sito Gómez, en el entorno del embalse del Umia
La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, este lunes, con el alcalde de Moraña, Sito Gómez, en el entorno del embalse del Umia XUNTA

La Xunta busca con esta inversión, de casi dos millones de euros, reducir la proliferación de cianobacterias en el embalse y minorar el riesgo de inundaciones

20 nov 2023 . Actualizado a las 15:24 h.

La Xunta anunció este lunes que plantará 7.000 árboles para recuperar la vegetación de ribera en las márgenes del río Umia. Con la actuación, que conlleva una inversión de casi dos millones de euros, se busca reducir la proliferación de cianobacterias en el embalse de A Baxe, en Caldas de Reis, y minorar el riesgo de inundaciones. La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, presentó el Plan de restauración fluvial bosque de ribeira dos ríos Umia e Gallo, una acción con la que se prevé mejorar la calidad de las aguas y de los ecosistemas asociados a estos lechos. El Diario Oficial de Galicia (DOG) publica este 20 de noviembre la actuación encomendada a la empresa pública Seaga. Se actuará sobre 35 kilómetros de las márgenes de esos dos ríos, 21 del Umia y 14 de su afluente, el Gallo.

Esta plantación se ejecuta dentro del Plan de recuperación, transformación y resiliencia, financiado por la Unión Europea Next-Generation. Las obras se centran en mejorar la calidad del suelo con nuevas plantaciones y en la recuperación de zonas degradadas, incluso mediante la eliminación de especies invasoras. También, precisan desde la consellería, se consolidará el bosque de ribera por ser formaciones vegetales con alto valor ecológico y ambiental, y por ser fuente de biodiversidad. Se incrementará, asimismo, la retención de agua de escorrentía, minimizando su aporte a los ríos Umia y Gallo. Dentro de los cauces, en las zonas más degradadas o que presenten problemas de erosión será necesario emplear técnicas de bioingeniería.

El plan que se va a acometer implica la retirada de los obstáculos que impidan el libre discurrir del agua, desde árboles caídos hasta madera muerta, piedras o tierras de colapso de taludes. La conselleira destacó, acompañada por el alcalde de Moraña, Sito Gómez (PP), que en la zona de servidumbre el objetivo es lograr un bosque de ribera recuperado, dispuesto a lo largo de una zona lineal en las márgenes de los ríos. De ahí esos 7.000 árboles que se plantarán. La titular de Infraestruturas expuso que estas intervenciones son fruto de diferentes estudios realizados por la Xunta, uno de ellos centrado en la cuenca del río Umia y de sus afluentes para mejorar su calidad. De ese informe se extrajo un diagnóstico: en general la calidad del bosque de ribera en las márgenes de los dos ríos es «aceptable en moitos puntos, pero non chega a ser óptima nalgunha parte do percorrido e iso afecta á calidade das augas».

Por su parte, los alcaldes de Caldas y de Cuntis, ambos socialistas, expresaron su malestar por no haber sido invitados al acto. El regidor de Cuntis, Manuel Campos, se expresaba así: «Nos parece lamentable que nos enteremos por la prensa de una actuación en el río Gallo. Parece más un acto electoral que otra cosa». Recordó que en más de una ocasión el Concello solicitó a Augas de Galicia la limpieza de la vegetación caída que entorpece el curso del Gallo y que está «causando danos en propiedades».