El Concello ya trabaja en las alternativas para garantizar que el servicio siga operativo. Cuenta con más de 70 usuarios y 36 trabajadores
22 oct 2025 . Actualizado a las 17:18 h.En febrero lo negaban, pero ya es oficial. La congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados deja la gestión y dirección del asilo de Caldas de Reis. Así se lo trasladaron por escrito las monjas al Concello. Las instalaciones llevan operativas más de 130 años y en la actualidad dan servicio a más de 70 usuarios, atendidos por 36 trabajadores. ¿Qué va a pasar a partir de ahora? La intención del Ayuntamiento es que el asilo continúe operativo. El alcalde, Jacobo Pérez (PSOE), afirmó que ya encargó a los técnicos municipales que elaboren un informe con los pasos a seguir. «Actuaremos con responsabilidade e transparencia», dijo el regidor, que anunció que mantendrá reuniones con responsables de la congregación y trabajadores del centro para conocer sus inquietudes. El objetivo es «buscar a maneira de atopar unha solución que satisfaga ás partes implicadas».
Precisamente este martes el alcalde asistió a un concierto que la coral de la Asociación de Xubilados e Pensionistas de Caldas ofreció en el asilo. Apuntan desde el gobierno local que el asilo es un referente, no solo para el municipio, sino para toda la comarca por la labor social que realiza. Además de velar por el bienestar de sus usuarios genera puestos de trabajo. Pese a su marcha, que justifican sobre todo en la falta de vocaciones, desde el Concello se agradece la labor de la congregación. «Durante todo ese tempo, a súa entrega e vocación de servizo foron un exemplo e un piar para fundamental no coidado das persoas maiores», subraya el regidor. La residencia fue inaugurada en 1887. Durante su larga trayectoria se superaron momentos de grandes dificultades, sobreponiéndose a sucesos graves como un incendio que se registró dos años después de su apertura. Jacobo Pérez tuvo también palabras para la madre superiora del asilo, cuyo trabajo y dedicación durante los últimos seis años «permitiu que o centro medrase, incrementando o número de traballadoras e consolidando aínda máis a importancia do asilo para a nosa bisbarra».