San Xoán de sardinas, ritos y tradición, pero también diverso y con los colores del Orgullo

San Xoán es mucho San Xoán para que, pese a coincidir con la medianoche del domingo y sobre todo con la madrugada de un lunes no festivo en la mayor parte de Galicia, se celebre casi con tanta contundencia como otros años. Pero lo cierto es que es así en la mayoría de los sitios y que, al anochecer del domingo, el olor a sardinas y churrasco impregnaba las comarcas de Pontevedra, O Salnés y Deza-Tabeirós como claro síntoma de que la fiesta, al menos la de llenar el buche, iba para largo. Quizás algunos no aguantaron hasta el encendido de las hogueras para no trasnochar demasiado. Pero otros sí lo hicieron. Vaya si lo hicieron. Uno de los puntos neurálgicos de la fiesta, como suele suceder, fue Poio, donde se congregaron decenas de personas para darle larga vida a las tradiciones más emblemáticas del San Xoán.

Algunos fueron madrugadores en cuestión de celebrar esta fiesta. Quizás para evitar que la resaca les pillara en pleno lunes o porque por la noche no se iba a celebrar la mítica hoguera de Eduardo Pondal, en Pontevedra ciudad la juerga ya se descorchó al mediodía, con una celebración convertida en canto a la diversidad. ¿Por qué? Porque dentro de los actos del día del Orgullo 2024 se incluía también una celebración de San Xoán, que se tiñó así de colorines y alegría bajo el sol que daba al mediodía en O Campiño de Santa María.

De Pontevedra, siguiéndole los pasos a la fiesta, sí o sí había que viajar ayer hasta Poio, hasta la explanada de A Seca, donde la cita era la habitual: sardiñada popular y hoguera al filo de la medianoche. La tradición del fuego es tal en el municipio que, más allá de la fogata pública, el Concello recibió 200 peticiones para prender lumbres privadas. Además, en el caso de Poio, como es tradición, el San Xoán se combinó con la siempre infalible verbena. Todo estaba preparado este domingo a última hora para que saliese a escena una de las formaciones clásicas de las verbenas del país, Los Players.

La música de Poio competía con la que sonaba también en Vilagarcía, donde el barrio de O Piñeiriño demostraba el músculo que tiene como epicentro de celebraciones. En este caso, la protagonista sobre el escenario iba a ser la orquesta Marbella.

Las hierbas, pisando fuerte

Antes de encomendarse a la diosa sardina, fueron muchos los que aprovecharon la tarde del domingo para recoger las hierbas de San Xoán con las que la tradición marca que hay que lavarse este lunes la cara. Instagram se llenaba de fotos y más fotos de vecinos recolectando las distintas especies. Y en las comarcas se sucedían las citas para aprender a seleccionar las flores. Hubo animada recogida en Poio, con Ronsel. O en Pontevedra, con Vaiopolorío. También salieron al campo con el mismo motivo en Lalín los vecinos de Pena Aguda. Y es que San Xoán, caiga el día que caiga, es mucho San Xoán.

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