El Obra cumple con la ACB

M.G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Los empresarios pidieron un crédito para abonar el fondo de ascensos y descensos

30 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El día fue largo, muy largo, para el grupo de empresarios que llevan las riendas del Obradoiro. Venía precedido de jornadas de trabajo contrarreloj para conseguir 1,7 millones de euros con los que hacer frente al fondo de regulación de ascensos y descensos exigido por la ACB. Y concluyó a última hora de la tarde con la formalización de un crédito por el referido importe, concedido por Novacaixagalicia.

A veces los gestos son más expresivos que las palabras. Y si bien durante la rueda de prensa en la que ofrecieron todos los detalles de las gestiones realizadas solo tomaron la palabra dos de los empresarios, Raúl López y José Ramón García, cuando se les preguntó si en algún momento habían visto que todo podía irse al traste, las expresiones afloraron espontáneamente en todos los presentes en la mesa. Fue un parto díficil. Y, tal y como precisó el propio José Ramón García, «esto no acaba más que empezar».

Nuevos desafíos

Efectivamente, el Obradoiro salvó otro escollo imperativo, pero de inmediato se avecinan nuevos retos. Debe preparar un presupuesto mínimo de 3,6 millones de euros y, a la par, ir sentando las bases para convertirse en sociedad anónima deportiva. Estima que el capital social que deberá suscribir se situará en torno a los 2,5 millones de euros. Y los rectores de la entidad confían en que los seguidores puedan aportar 1,5 millones.

Los empresarios apelaron al apoyo de la afición y de las instituciones para tratar de llevar a buen puerto todos los desafíos. Por lo que respecta al presupuesto, prevén que entre un 25% y un 30% debería ser cubierto por los abonados y que sería necesario un patrocinador principal que aportase una cantidas similar. «Lo ideal sería que llegase al 50%», apuntó García, para no tener que echar mano del capital social.

Durante estos días el Obradoiro ha centrado todos sus esfuerzos en conseguir el dinero para el fondo de ascensos y descensos. A partir de ya empezará a cobrar relieve la planificación deportiva. Bulfoni y Hopkins tienen la continuidad garantizada. Andrés Rodríguez, Kendall y Deron Washington tienen sus contratos prorrogados, si bien tanto los jugadores como el club pueden quedar liberados de ese compromiso haciendo frente a una penalización en el entorno de los 15.000 o 20.000 dólares.

El fondo de ascensos y descensos volvería a las arcas del Obra en caso de que a la conclusión de la próxima temporada acabase entre los dos últimos y tuviese que retornar a la LEB.

Podría sufrir un descenso administrativo si logra la permanencia pero no consigue suscribir el capital social que le fije el Consejo Superior de Deportes para convertirse en sociedad anónima deportiva. En ese caso, no recuperaría el fondo.

A diferencia de temporadas anteriores, el Obradoiro puede ponerse manos a la obra para la confección de la plantilla en el mes de julio y no en el de agosto. El objetivo es armar un equipo competitivo que luche por la permanencia con garantías.

A la par, y de inmediato, se articularán mecanismos para incentivar a los abonados a fin de que adquieran acciones. Quienes opten por esta fórmula tendrán una serie de ventajas que están todavía por definir.

Próxima asamblea

De momento, y para el jueves 14 de julio, está ya convocada una asamblea de socios que incluye en el orden del día un punto que tratará el estado de ejecución del acuerdo de conversión en sociedad anónima deportiva y las nuevas exigencias.