El alcalde cede la portavocía a Marta Lois en el pleno reclamado por el PP

El pleno celebrado ayer por la corporación municipal para abordar una serie de acciones estratégicas solicitadas por el grupo del PP no obtuvo el objetivo de los populares de que fueran adelante. Se encontraron con la postura contraria de Compostela Aberta y con las reservas de nacionalistas y socialistas.

Pero el grupo de Agustín Hernández no solo no encontró el apoyo de las demás fuerzas políticas de la oposición, sino también el desinterés del propio equipo de gobierno, que había reafirmado el derecho de los populares a expresar sus planteamientos en el pleno pero no los encaró con sus primeros espadas.

En efecto, ni el alcalde, Martiño Noriega; ni el portavoz del gobierno, Xan Duro, intervinieron en defensa de las posiciones de Compostela Aberta. Lo hizo marta Lois, tras el acuerdo adoptado el día anterior para que fuese la portavoz ayer. En el ambiente se palpaba el clima tenso de los encontronazos de estos días por el tema okupas, aunque nadie lo mencionó en la sesión. Sí aludió la edila a la «intencionalidad partidaria» de la convocatoria popular.

La ausencia en el debate del alcalde contrarió al portavoz popular, quien expresó su decepción y proclamó que el regidor no tenía interés en hablar de los temas de la ciudad y que seguramente utilizaría el «turno da cobardía» (es decir, el del cierre del pleno). Pero Noriega ni siquiera usó ese turno final, y fue la propia Marta Lois la que cerró la sesión.

Otro momento tenso fue cuando Marta Lois aludió a la corrupción del Partido Popular, a lo que Agustín Hernández replicó que «a miña honra é igual que a de calquera de vostedes e a do meu grupo é maior que a do seu grupo», a lo que contrarreplicó Lois diciendo que Hernández figuraba cerrando la lista de Gerardo Conde Roa. El edil popular también cuestionó el papel de «muleta» del BNG, que rechazó Rubén Cela. El que más a salvo estuvo de las descargas dialécticas fue el PSOE.

Los populares, por boca de Agustín Hernández, desgranaron una a una sus propuestas, que fueron contestadas por los tres grupos restantes. Y los tres coincidieron en una apreciación: que las líneas de gobierno las marca Compostela Aberta. En ese sentido, cuestionaron la iniciativa del PP.

Pero además, nacionalistas y socialistas concordaron en otro aspecto: que la sesión de ayer era una versión reducida de un debate del estado del municipio, que lleva sin convocarse desde hace seis años. Tanto populares como Compostela Aberta recibieron las críticas por esta ausencia de un debate integral que, resaltaron los demandantes, es obligado por la normativa.

Al final, con la abstención de los socialistas y los nacionalistas y el voto contrario de Compostela Aberta, la propuesta popular fue rechazada.

BNG y PSOE pidieron la convocatoria del pleno del estado del municipio

Las iniciativas del grupo popular no tuvieron el apoyo de ninguno de los grupos políticos

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