Hostelería prevé una ocupación entre el 80 y el 90 % durante agosto

Montse García Iglesias
Montse García SANTIAGO / LA VOZ

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Julio se cerró con los hoteles en torno a un 70 % de su capacidad, por debajo del 2016 cuando se celebró al Año de la Misericordia

09 ago 2017 . Actualizado a las 00:10 h.

Ya con el relevo de los turistas de agosto por los de julio completado, los hoteles de Santiago presentan estos días una ocupación entre el 80 y el 90 %. Unos valores que desde la Asociación Hostelería Compostela aguardan que se mantengan a lo largo del mes. «Después de finales de julio y principios de agosto bastante regulares, como sucede habitualmente, ya llegó la temporada alta», explica Rita Sobrado, secretaria de Hospedaje del colectivo.

En julio, la ocupación rondó el 70 %, con una primera quincena más floja y, después, del 23 al 25, coincidiendo con los días grandes de las Festas do Apóstolo, rozando el lleno. Con estos datos, desde Hostelería Compostela indican que regresan a los valores habituales de ese mes, después «del espejismo del año pasado, cuando pensamos que julio también podía llegar a ser bueno en Santiago». Entonces, recordó Sobrado, se celebró el Año de la Misericordia, lo que provocó la llegada de muchos grupos cristianos de polacos e italianos, «que llenaban los hoteles de 4-5 estrellas, que lo que hacía era que después, por el efecto rebote, se llenaban el resto. Pero ya regresamos a la tónica habitual de la ciudad».

Y en ese comportamiento habitual de la ciudad está que el mes de agosto -con mayoría de turistas nacionales-, y el de septiembre son los mejores. Ahora, la mirada está puesta en el puente del 15 de agosto. Las perspectivas son muy buenas para esas fechas, rozando el lleno. «Vamos a llegar al 100 %, por lo menos los hoteles que están en el casco histórico, salvo que haya alguna cancelación en el último momento. Después habría que hacer la media con los que están más alejados. Además, será sin bajadas de precios,», afirmó la secretaria de Hospedaje del colectivo. La cuestión de las tarifas sí que es una diferencia respecto a los últimos ejercicios. «Hace dos o tres años había que rebajar más. Ahora, el turista nacional está saliendo más. Aumentó el número de alojamientos y seguimos estando al completo. Esto quiere decir que nos está visitando más gente», dice Rita Sobrado.

¿Incide el tiempo cambiante en las pernoctaciones? «La gente cuando viene al norte lo que se espera es esto. Lo que le sorprende es que estemos a 35 grados, como pasó en junio. Si cabe, aún puede ser beneficioso para ciertos tipos de negocios, como los cafés. No así para las terrazas, que pagan mucho», afirmó, para añadir que se trata de gente que no está alojada, pero que busca hacer una visita cultural al no poder ir a la playa.