
Cerca de 80.000 personas visitaron el Pórtico de la Gloria restaurado. La Fundación Catedral duda que lo recaudado con las visitas de pago, que empezarán el 1 de diciembre, sea suficiente para sufragar su mantenimiento
21 sep 2018 . Actualizado a las 14:20 h.79.782. Es la cifra redonda de las personas que este verano pudieron disfrutar de la obra restaurada del Pórtico de la Gloria tras soportar largas colas. Finalizada esa etapa de visitas abiertas y gratuitas, el monumento permanecerá cerrado unos meses por los trabajos en el interior del templo, pero se reabrirá el 1 de diciembre con visitas guiadas que ya no serán gratuitas, con un precio general de 10 euros que subirá a 12 si se suma a las otras visitas del museo catedralicio. Habrá, además, tarifas reducidas para mayores, estudiantes y parados, así como invitaciones para socios de Amigos de la Catedral, vecinos de Santiago y peregrinos que podrán acceder excepcionalmente de forma gratuita, con una diaria para los peregrinos y dos grupos los domingos por la tarde para los compostelanos.
El deán de la Catedral de Santiago, Segundo Pérez, y el director de la Fundación Catedral, Daniel Lorenzo, se defendieron esta mañana de las críticas por el cobro de la entrada, reiterando que el control de las visitas se hace necesario para la conservación del monumento y que ese control tiene un coste. De hecho, Daniel Lorenzo puso en duda que el cobro estipulado vaya a ser suficiente para hacer frente al mantenimiento del Pórtico, que cifró en unos 200.000 euros anuales.
El deán y el director de la fundación negaron de forma rotunda que la restauración hubiese costado dinero a las arcas públicas «porque la sufragó al cien por cien» una fundación privada, indicó Lorenzo en referencia a la Barrié, que destinó a tal fin 6 millones de euros. Segundo Pérez recordó que «nin a Xunta, nin o Consorcio nin o Concello aportaron un céntimo» e insistió en el esfuerzo económico que supone para el cabildo de la Catedral y para la fundación el mantenimiento del edificio y de su personal. Puntualizó, además, que mientras duraron las obras, la Catedral corrió con los gastos de seguridad, que se elevaron a 600.000 euros, y que puso su personal a disposición de los trabajos.
Y quién paga la fiesta
El director de la Fundación Catedral invitó a una reflexión dirigida a quienes piden que el acceso al Pórtico sea abierto y gratuito: «¿Y quién paga la fiesta?», se preguntó. «Porque nuestra obligación es conservar la obra y preservarla para las generaciones futuras». Lamentó, además, que de la asociación Amigos de la Catedral, cuyos miembros tendrán acceso gratuito, «solo 20 sean compostelanos». Algunos, tal y como reconoció el deán, se dirigieron por escrito al cabildo con duras críticas al cobro de la entrada. «E un deles nin sequera tiña a cuota ao día». Segundo Pérez recordó que la Catedral se financia con las limosnas de los fieles, y que estas descendieron notablemente.
Daniel Lorenzo adelantó que la propia Catedral pondrá 100.000 euros para reducir el tiempo de duración de las obras de restauración dentro de la nave, que eran de 18 meses y se quedarán en 12.