La arquitecta de Amancio Ortega firma el proyecto que servirá de base para siete nuevas residencias públicas en Galicia

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

El trabajo presentado por Elsa Urquijo resultó vencedor en el concurso de ideas del plan «Como na casa» de la Xunta

05 jun 2019 . Actualizado a las 16:47 h.

Un proyecto de la arquitecta Elsa Urquijo servirá como base para elaborar las siete nuevas residencias públicas que proyecta la Xunta en las grandes ciudades gallegas. El trabajo presentado por el estudio coruñés, en el que han confiado desde el cocinero Pepe Vieira a Carolina Herrera o Amancio Ortega, tanto para diseñar desde edificios emblemáticos de Inditex como para supervisar los escenarios de la boda de su hija Marta Ortega, ha ganado el concurso «Como na Casa», impulsado por la Administración autonómica en colaboración con Afundación para orientar las futuras instalaciones para mayores en las principales zonas urbanas.

Esto supondrá la creación de 900 nuevas plazas de atención a la dependencia (150 en Vigo y A Coruña; y 120 en Santiago, Pontevedra, Ferrol, Ourense y Lugo) y 500 empleos para dotar a las residencias del personal necesario. La propuesta vencedora se aleja del estereotipo de geriátrico lúgubre, frío y hostil, una imagen «típica», subrayó la conselleira de Política Social, Fabiola García, que «está cerca de ir ao caixón do pasado». 

La arquitecta coruñesa destaca sobre el trabajo ganador que «se hizo basándonos en la idea que proponía el plan de la Xunta, de construir como una casa, pensando en las personas que van a vivir allí, desde el lado humano. Creamos espacios con mucha luz, pero muy acogedores, para que realmente los que la habiten la sientan como su hogar. A base de sólidos y vacíos intentamos generar un módulo que pudiese servir para todas las parcelas y que generara esos ámbitos para las personas». Elsa Urquijo se enfrentó así a un reto, el de la estandarización. ¿La solución? «Hicimos un módulo o habitación tipo que, una vez creado, se pueda llevar luego a cualquier residencia, de forma que se abaraten costos, mantenimiento y que sea algo mucho más versátil», dice. 

De entre las doce propuestas presentadas al concurso de ideas, el jurado valoró en la solución del estudio coruñés «a arquitectura neutra e sinxela da proposta, que alcanza unha imaxe moi adecuada ao uso previsto, que transmite serenidade e calaridade», así como una composición de plantas «moi ordenada, sinxela e intuitiva, cun esquema de funcionamento que articula satisfactoriamente as comunicacións verticais e horizontais». Además de con un diseño moderno, las residencias integrarán los avances tecnológicos y, entre las novedades avanzadas, dispondrán de unidades psicogeriátricas para tratar a los usuarios con enfermedades mentales. 

El director gerente de Afundación, Pedro Otero, explicó que entre los requisitos del concurso de arquitectura estaba el que tuvieran «moi presente o elemento humano, non só a estética e a sustentabilidade económica e medioambiental». Fabiola García, por su parte, incidió en que como centros públicos es necesario que sean «agradables, pero tamén funcionais e accesibles». La conselleira agradeció el compromiso de Afundación a la hora de costear el diseño de los nuevos centros residenciales (un capítulo al que la Obra Social de Abanca destinará 200.000 euros), al tiempo que destacó el «talento e creatividade dos nosos arquitectos»

Sobre cuándo podrán abrir sus puertas estas siete residencias, Fabiola García no se aventuró a dar plazos. Explicó que, a partir del proyecto de Elsa Urquijo Arquitectos se firmará el contrato «nas vindeiras semanas» para la redacción de los anteproyectos a partir de los cuales se elaborarán los definitivos; si bien se comprometió a «axilizar os prazos todo o que poidamos» para hacer realidad esos centros en cuanto sea posible. Se calcula una inversión en ellos de 66 millones de euros, con una primera partida ya consignada en los presupuestos de este año. 

La propuesta ganadora del concurso del plan Como na Casa recibió un premio por valor de 9.000 euros. El segundo premio fue para Abalo Alonso Arquitectos (con estudio en Compostela), que recibió 6.000 euros. Y, el tercero, para la firma Castroferro (Vigo), la cual obtuvo otros 5.000.