El tráfico vuelve a Clara Campoamor, reformada para servicio de la intermodal
SANTIAGO
Desde el 2021, absorberá la circulación de autocares de la nueva estación
17 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Clara Campoamor recuperó ayer el tráfico rodado después de medio año de obras en el que el vial ha sufrido una importante transformación. Aunque su nueva imagen no está todavía completa (le falta el arbolado y la nueva barandilla hacia las brañas de Sar), la intervención sobre el firme ha concluido y ya está a disposición de nuevo de los compostelanos y del tráfico que a diario accede y abandona la ciudad por O Castiñeiriño.
Sin embargo, sus usuarios habituales han de tener en cuenta que ahora el límite de velocidad está en 30 kilómetros por hora (antes 50) y que los cuatro carriles para la circulación anteriores se han quedado en dos, uno por sentido. Los otros dos se han reconvertido en espacio para bicis y en un carril especializado para autobuses. Precisamente, el objetivo de la transformación del vial era generar los accesos rodados para la futura estación de autobuses que la Xunta construye en la zona y a la que solo le resta el 10 % de obra. Así lo apuntó la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, quien acompañó al alcalde, a los portavoces de la oposición municipal y a representantes de la zona en la visita con la que se dio por recuperada la actividad del vial.
Hasta el arranque del 2021 no habrá tráfico de autobuses por ese firme, pero, a partir de ahí, el movimiento que ahora concentra Rodríguez de Viguri se trasladará a Clara Campoamor. La reforma ha especializado el carril lindante con la estación de autobuses para autocares y taxis, con la intención de que el transporte regular con destino a la estación entre por la rotonda de Sar y salga por la de Pontepedriña. El proyecto ha contemplado el desdoblamiento de un tramo del carril de circulación general en dirección a Sar para facilitar también la entrada a la terminal desde la rotonda de Pontepedriña, pero ese movimiento no está, de momento, en los planes de Raxoi.
La reapertura de la reformada Clara Campoamor es solo el primer paso de la transformación que está registrando el ámbito entre el Hórreo y Pontepedriña para dotar la nueva área intermodal de transporte (tren y carretera), la primera en Galicia, indicó Ethel Vázquez tras recordar que la Xunta está invirtiendo 16 millones de euros en la zona, entre la nueva estación de autobuses, que financia la Xunta en solitario, y la pasarela sobre las vías del tren que unirá esa terminal con la de Renfe y que procura también la conexión peatonal y cubierta entre el Hórreo y Pontepedriña. El coste de esta última instalación lo asumen las Administraciones central, autonómica y local, mientras que la reforma de Campoamor (1,56 millones) ha sido cosa solo del Concello, que contó para ello con fondos Feder.
Por delante queda la adaptación de la estación ferroviaria y su nuevo acceso por el Hórreo, calle que será referencia más adelante (ahora lo es A Rosa) para el transporte metropolitano. El alcalde no obvió que Santiago no tiene aún la estación de tren «que merece» y Vázquez demandó el compromiso de Madrid con ella y mejor atención a los servicios de tren en Galicia. Bugallo observó que ese proceso de transformación es fruto de la colaboración entre Administraciones y reconoció «o traballo» del gobierno local anterior. Desde CA le recordaron ya que el proyecto ejecutado en Campoamor ha sido, en esencia, el que dejó proyectado su gobierno y que tanto Bugallo como Vázquez cuestionaron en su momento. «Alegrámonos que hoxe recoñezan que era un proxecto axeitado», dice Marta Lois.