Cree que el turismo de congresos y los bonos estimularán las ventas
02 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El pequeño comercio de Santiago es optimista ante el inicio de la campaña de otoño e invierno. «Es la mejor temporada, la que salva las ventas de todo el año, porque en verano se consume menos ropa y calzado, y se gasta menos en artículos. En otoño se precisan más cosas, y el consumo es más alto», apunta José Antonio Seijas, presidente de la Asociación Comercio Punto Compostela. José Ángel Blanco, gerente de Compostela Monumental, y José María Fernández, presidente de la Fundación Santiago Centro, coinciden en la previsión de que será «una temporada buena», aún a pesar de que «se escuchen mensajes negativos de crisis y de recesión», apunta Fernández.
En esta lectura optimista de los principales portavoces del comercio de Santiago se considera fundamental el alargamiento de la temporada alta del turismo y, sobre todo, la celebración de los congresos previstos hasta noviembre. Fernández insiste en que la «ciudad está llena, y cuando hay mucha gente en las calles, se vende». En su opinión, Compostela está viviendo un buen momento, porque el Xacobeo está funcionando. El presidente de Santiago Centro cree que el «comercio especializado y modernizado está teniendo buenos resultados. Santiago está de moda y se nota en la afluencia turística». Coincide con el gerente de Compostela Monumental en que el turismo de Congresos es «de un poder adquisitivo alto, que deja dinero en la ciudad». En su opinión, con los datos actuales, «no hay motivos para estar preocupados. Soy optimista», abunda.
También José Ángel Blanco cree que el otoño alejará «los nubarrones y todo lo negativo que apuntan los malos augurios. Confío en que irá bien». Blanco destaca que el turismo, no solo el de Congresos, «sigue llegando a Santiago. El comercio del casco histórico sigue recibiendo turistas y peregrinos, y eso es una buena noticia». Con todo, Blanco se muestra preocupado por la «capacidad de los comercios para soportar la subida de los costes de los gastos fijos, pero creo que será una temporada con ventas». El gerente de Compostela Monumental llama la atención sobre la situación que pueden estar atravesando aquellos comerciantes que «recurrieron a préstamos ICO para superar los meses de pandemia. Estos créditos se están pagando. Pueden tener ingresos por ventas, pero los gastos son elevados», apunta.
Frente a la euforia de los portavoces de Santiago Centro y Compostela Monumental, José Antonio Seijas prefiere ser «optimista, pero con cautela». Teme que «los mensajes sobre la inflación puedan restar alegría a las compras. Temo que la gente prefiera ahorrar, por si se cumplen los mensajes más negativos». Seijas estima que, si se cumplen las previsiones, las ventas en el pequeño comercio no deberían verse afectadas, aunque matiza: «Estamos ante una situación cambiante. Quiero confiar en que se repita lo que viene ocurriendo otros años, pero no es fácil hacer un previsión».
Los bonos corazón y activa, un revulsivo
Los tres portavoces consideran que la puesta en marcha de los bonos corazón, del Concello de Santiago, y activa, de la Xunta de Galicia, permitirán dar un impulso a las ventas. Seijas cree que deberían planificarse mejor para evitar que coincidan en el tiempo, mientras Blanco apunta que se trata de una manera de ayudar tanto a los consumidores como a los comerciantes. La gran ventaja de estos bonos, en opinión de Blanco, es que los consumidores podrán anticipar sus compras de Navidad. «Al no ser excluyentes, tendremos un descuento importante». Frente a quienes opinan que los bonos afectarán a la campaña de Navidad, Blanco considera que «se adelantan las compras a octubre o noviembre, pero son personas que no iban a comprar en esos meses si no tuvieran los descuentos. No afecta».
Seijas, por su parte, considera que aún tendrá que celebrarse una reunión con el alcalde de Santiago para debatir detalles de los bonos corazón. En su opinión, la fecha de finalización —prevista inicialmente para el 10 de diciembre— habría que revisarla, y también cuestiona que los bonos puedan utilizarse tanto en el comercio y la hostelería como en la Praza de Abastos. Recuerda que este recinto ya tuvo los suyos en exclusiva.