La Xunta tilda de «ocorrencia» la parcela que ofrece de nuevo el Concello de Santiago para el párking del Clínico y la descarta

Álvaro Sevilla Gómez
Álvaro Sevilla SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

Ethel Vázquez afirma que no solucionaría el problema de aparcamiento: «Para resolver a mobilidade dun hospital hai que traballar dunha maneira máis seria»

03 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

«Esa parcela é unha ocorrencia e, se mo permiten, un parche». Contundente y clara, así se mostró ayer la conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, que de manera tajante descartó la parcela que, tanto Xosé Sánchez Bugallo como Goretti Sanmartín, han puesto encima de la mesa como vía para solucionar el problema de aparcamiento que sufre el Hospital Clínico de Santiago de Compostela. Aunque el responsable de Sanidade, Julio García Comesaña, afirmó este martes que era necesario esperar al estudio de movilidad que está elaborando la Xunta, Vázquez adelantó lo que a todas luces parece el rechazo frontal y contundente del ejecutivo gallego a esta vía: «Para resolver a mobilidade dun hospital hai que traballar dunha maneira máis seria».

Sus palabras vienen a dar respuesta al ofrecimiento de la nueva alcaldesa compostelana, Goretti Sanmartín, que anunció este lunes que el citado solar quedaba reservado seis meses, en espera de que la Xunta decida construir un aparcamiento público en él. La realidad, más tras las palabras de Vázquez, es que, con el actual Gobierno gallego, eso no ocurrirá. En primer lugar porque, como afirmó la conselleira, si se resolviera el problema «xa a tivéramos aceptado» y porque, precisó que no encaja en los criterios de accesibilidad necesarios para un edificio sanitario, ya que se encuentra en pendiente, algo difícil de solventar para las personas con movilidad reducida.

La finca, presentada por Bugallo el pasado mes de febrero, permitiría crear 450 plazas de aparcamiento gracias a los 3.500 metros cuadrados disponibles, algo que, desde todas las partes, admiten que sería insuficiente para un hospital que da servicio a pacientes de toda el área sanitaria. Pero mientras PSOE y BNG creen que al menos es una manera de empezar a abordarla la cuestión, el PP quiere abordarla de manera integral, de ahí su rechazo y a su calificativo de «parche».

La otra propuesta que se colocó encima de la mesa la hizo el líder del PP en Raxoi, Borja Verea, que presentó en plena campaña electoral un proyecto de un párking de cuatro plantas y 2.000 plazas que se ubicaría contiguo al Clínico y que estaría conectado de manera subterránea con el edificio principal, el Gil Casares y el futuro centro de protonterapia, todo por un coste de unos 9 millones de euros.

Cabe destacar que ese plan fue diseñado por su equipo de campaña y no directamente por la Xunta, de ahí que el gobierno autonómico tampoco se posicionará a favor o en contra, sino que solo reconoció que era otra opción a valorar. A falta del estudio de movilidad, que tanto Julio García Comesaña como Ethel Vázquez calificaron de fundamental, lo que parece claro es que la parcela que se ubica entre el Cimus y el Cebega no se convertirá en el aparcamiento que reclamó primero Bugallo y ahora vuelve a poner Sanmartín encima de la mesa. El camino que vislumbra la Xunta se antoja diferente, pero por el momento sigue sin salir a la luz pública.

El caos viario, la tónica que en temporada alta llega a colapsar Santa Marta

Coches encima de las aceras, otros en doble fila y ni un centímetro disponible para aparcar. Esa es la tónica que define una mañana normal en el aparcamiento del Hospital Clínico de Santiago. Aunque en agosto la actividad sanitaria se relaja debido a las vacaciones de los facultativos, el caos durante la temporada alta es el precio que pagan todos los pacientes, sin excepción.

El poco espacio para estacionar, sumado a las miles de personas que acuden al complejo sanitario, motiva que incluso el párking disuasorio que se encuentra en Santa Marta llegue a colapsarse en los días de mayor actividad. Esos problemas incluso han llegado a afectar a la conexión viaria con el periférico y a la salida hacia O Milladoiro.

Las obras de ampliación del complejo reducirán en 300 las plazas disponibles

Sin acuerdo alguno sobre qué camino seguir para solucionar los problemas de aparcamiento en el Hospital Clínico, lo cierto es que la obras de ampliación reducirán todavía más el espacio disponible para estacionar. Las previsiones indican que habrá unas 300 plazas menos, lo que redundará en problemas añadidos.

Desde la Xunta hacen hincapié en que el transporte metropolitano debe dar solución a los vecinos de Santiago para que puedan llegar hasta el complejo hospitalario, una cuestión que, afirman, depende directamente del Concello.

Que todo cambie...

«Cambiar todo para que nada cambie». La mítica frase de Giuseppe di Lampedusa podría servir para explicar la problemática que, desde hace años, atenaza a los pacientes del Hospital Clínico de Santiago. Las propuestas cambian, pero los coches sobre las aceras y un caos circulatorio digno de Nueva Deli permanecen inmutables. En un perfecto juego de trileros, desde las diferentes instituciones se lanzan la responsabilidad evitando admitir una cosa: hace falta dinero y partidas presupuestarias para solucionar dicho problema. ¿De dónde saldrá? Una vez conozcamos el estudio de movilidad de la Xunta esperemos que todos dejen de regatear y comiencen a afinar el tiro. Como Vinicius.