José Antonio Redondo: «La polio me hizo ser una persona más estudiosa, reflexiva y tímida»

«La poliomielitis marcó mi vida. Tenía siete años y me pasé uno entero viendo la calle desde la ventana. Mis padres se sacrificaron para enviarme a estudiar a Santiago. La enfermedad me hizo ser una persona más estudiosa, reflexiva y tímida». Son las palabras del final de la conversación con José Antonio Redondo López (Lugo, 1951), que fue catedrático de Economía Financiera y Contabilidad de la USC y Conselleiro Maior del Consello de Contas de Galicia en 2015-23. «Fue un período muy positivo, porque entramos en una época en la que la legislación ampliaba las competencias, circunstancia que nos permitió afrontar la prevención de la corrupción. Creamos modelos adaptados a las distintas Administraciones Públicas para detectar por anticipado los riesgos», según subraya. El Salón Nobre de Fonseca acogerá mañana un homenaje a Redondo que presentará María Cadaval, profesora de Economía Aplicada de la USC.

Pero el profesor Redondo tuvo un tercer destino relevante como director general del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS), donde debutó con un conflicto a la puerta de casa. Las deficiencias en las viviendas protegidas de As Fontiñas originaron protestas, una situación que se fue resolviendo, cambiando entre otras cosas el sistema de calefacción, según rememora el alto funcionario. «Hoy es un gran barrio y se ve que fue un ejemplo de cooperación entre las Administraciones. Área Central llegó a ser un eje importante de la ciudad, y sería bueno que recuperase su vitalidad. Por otra parte, desde el IGVS hicimos mucha promoción pública. En Santiago desarrollamos una de las mayores operaciones de suelo de Galicia», subraya el que fue su titular entre 1995 y 2005. Salgueiriños, Conxo, A Choupana, A Muíña son algunas de las áreas donde se realizaron estas intervenciones, según afirma, «convirtiendo a Santiago en aquel momento en una ciudad muy beneficiada en cuanto a la promoción de vivienda», añade.

Pero de su etapa en el IGVS, de lo que más orgulloso se siente Redondo es de todo lo concerniente a la rehabilitación: «Santiago fue una escuela de rehabilitación que sirvió de guía y en la que se formaron muchos arquitectos, que posteriormente hicieron una gran labor en las oficinas que se fueron extendiendo por Galicia. El máster en renovación urbana y rehabilitación del IGVS, la USC, el Consorcio y el Concello de Santiago fue una iniciativa de gran calado de la que estoy muy orgulloso. Y hoy tendría que repetirse». Afincado en la capital de Galicia desde que vino a estudiar, Redondo dice que es la mejor ciudad para vivir; entre otras cosas porque su abuela Rosalía Torres Bonome era de Conxo. Pero lamenta la masificación del turismo y la desaparición del comercio de proximidad.

Redondo elige la actividad académica como su preferida. «La Universidad fue mi casa, en la que, afortunadamente, me rodeé de gente extraordinaria que supo mejorar mi labor. A mí me parecía increíble ser profesor. Yo era una persona muy tímida y, en mi primera clase, el alumnado me tomó por un estudiante más; así que tuve que dejarme barba y bigote para parecer más serio. Lo más gratificante es encontrarme con antiguos alumnos agradecidos», tal como explica. Este año su promoción universitaria, a la que pertenece el expresidente de la Xunta, González Laxe, celebra el quincuagésimo aniversario. Una efeméride que reunirá el 30 de junio a medio centenar de licenciados. Ya sin obligaciones laborales, Redondo dedica parte de su tiempo a la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras de España, de cuya junta de gobierno es miembro.

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