El centro de Santiago para personas sin hogar será realidad después de una década
SANTIAGO
La idea surgió con Compostela Aberta, se modificó con el PSOE y el actual bipartito lo recondujo
04 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Tres mandatos municipales han sido necesarios para que el Centro de Atención Integral a Persoas sen Fogar, que ocupará los edificios del antiguo centro de interpretación ambiental de Belvís, sea una realidad. La propuesta surgió durante el gobierno de Martiño Noriega (Compostela Aberta), que no consiguió completar la idea ni asegurar el proyecto con la adjudicación de las obras. Al llegar el PSOE al ejecutivo local, el proyecto quedó paralizado y se inició su modificación. Durante los años de Xosé Sánchez Bugallo, el centro integral pasó a centro de inclusión social con una veintena de despachos y salas de reuniones y la reducción de los espacios habitacionales. Este proyecto fue licitado antes del cambio del gobierno local, y en julio del 2023, el bipartido BNG-CA adjudicó el proyecto socialista. Sin embargo, unos meses después se llegó a un acuerdo y se anunció un modificado, que acercó el proyecto definitivo al inicialmente planteado por CA.
La reforma está prácticamente terminada, y se prevé que finalice en los primeros meses del 2025. Tras la ejecución de las obras, el Concello deberá adjudicar el mobiliario tanto de las zonas comunes y espacios para despachos como el de los dormitorios. También tendrán que cerrar definitivamente el sistema de gestión del centro. Fuentes de Servizos Sociais consideran que el centro de atención integral podrá estar en funcionamiento este mismo año, aunque no se aventuran a dar una fecha concreta.
El proyecto definitivo contará con doce habitaciones, dos de ellas dobles, y con espacios comunes como cocina, comedor y lavandería de uso común, siguiendo así el modelo de inserción denominado «housing first» que considera que la disposición de una vivienda facilita que las personas sintecho logren la inserción social.
El centro es un complejo que cuenta con cuatro edificios. En el primero, en la planta baja estarán los espacios comunes; y en la superior, cuatro habitaciones que sustituyen a cuatro despachos proyectados en la etapa socialista. Se mantienen tres despachos para el trabajo social especializado y personalizado de acompañamiento psicosocial. El segundo edificio es una amplia sala diáfana; y el tercer inmueble, con una superficie de cien metros cuadrados, albergará un espacio de atención diurna para personas sin hogar con zonas de descanso, baños y duchas, armarios y lavandería. El cuarto edificio también fue modificado. Los despachos y aulas de formación desaparecen para ganar más habitaciones. Se acondicionarán seis dormitorios individuales y uno doble en la planta superior, todas con baño; y una habitación doble más con baño adaptado a personas con movilidad reducida en la planta baja, donde también se acondicionará espacio común y salón.
El coste definitivo del proyecto es de 960.000 euros, el 19,91 % más que el ideado por el PSOE. Esta diferencia, junto a los 40.000 euros, para el mobiliario, será asumido por fondos propios. El resto del presupuesto se cubre con el plan europeo Edusi, de ahí que el bipartido optara por mantener la adjudicación impulsada por el PSOE, para poder certificar obra y pagarla con esos fondos.