Vuelve el corte parcial de O Pombal, ahora para arreglar San Clemente

m.m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

El acabado de la calzada, ya abierta al tráfico hace semanas, no convence a muchos usuarios por sus irregularidades

24 jun 2025 . Actualizado a las 10:15 h.

Coincidiendo con la apertura de la rúa do Pombal, los vecinos centraron sus críticas en los graves problemas de accesibilidad de las aceras del tramo siguiente, el que corresponde al campo de San Clemente. Ahora, cuando no se han cumplido dos meses desde la apertura total al tráfico la calle, el Ayuntamiento vuelve a la zona para ejecutar un proyecto con el que se prevé resolver las carencias de accesibilidad en las aceras y también mejorar la recogida de las aguas pluviales.

La obra, que mantendrá cortada la rúa do Pombal al tráfico solo en el carril de subida desde Galeras hacia el Campo de San Clemente durante dos meses, está incluido dentro del paquete de 18 actuaciones en vías públicas, a las que el Concello destinó 366.000 euros.

Los trabajos arrancaron en la mañana de ayer, inicialmente con el corte de tráfico y el traslado del material y con sorpresa para algunos conductores. La obra afecta concretamente al tramo de acera que va desde el paso de peatones situado justo antes de la salida del aparcamiento en superficie hasta la confluencia con la rúa San Clemente, y el mismo tramo en el otro sentido de la marcha. La ejecución está prevista en dos meses, según anunciaron fuentes municipales.

Otra de las críticas de la obra del Pombal, y que no está previsto corregir, es el diseño de la calzada de O Pombal. Los que discurren a diario por la calle o lo hacen de forma esporádica no dejan de sorprenderse con el movimiento de balanceo constante, debido a un pavimento que no es totalmente plano, sino que tiene desniveles continuos. Al ser preguntados los responsables locales por este sistema de suelo, respondieron que se trata de un diseño destinado a conseguir calmar el tráfico. La realidad es que hay conductores que aseguran sufrir mareos al circular por la calle, y quienes sufren de vértigo ni se plantean pasar por allí.