¿Emprender a los 24? Ella lo hizo y abrió el primer estudio de danza de Brión

SANTIAGO

Paula Eitor está al frente de Dance & Fit en Brión, donde combinan baile y fitness
03 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.«Eres demasiado joven para volar por tu cuenta». «Eso no da dinero, mejor búscate algo seguro». «Hay demasiada competencia y tú ni siquiera tienes experiencia». «Lo único que vas a conseguir es perder el tiempo y el dinero»... La sociedad tirotea a diario con mensajes desalentadores cualquier intento de emprender, especialmente entre las nuevas generaciones. Lo fácil sería rendirse y dar la batalla por perdida sin pelearla, pero aún quedan veinteañeros que se resisten y su ilusión y arrojo son más fuertes que cualquier presagio catastrofista. Un caso cercano es el de Paula Eitor Casal, brionesa de 24 años, quien siempre tuvo claro que contaba con iniciativa y autonomía para abrirse camino por su cuenta. Tanto es así, que fue ahorrando para cuando llegase ese día. «Ya tenía la idea de invertir en algo propio y, por suerte, tuve mucho apoyo familiar», destaca la vecina de Bastavales, quien cuenta orgullosa que ha abierto el primer estudio de danza de su concello, Dance & Fit, una nueva academia en Os Ánxeles que da cabida actividades relacionadas con el baile y el fitness.
«Siempre me gustó el deporte y bailar, desde pequeñita. Hice primero un ciclo superior de Actividades Físicas y Deportivas en IES Rosalía de Castro (Santiago). Como me gustaban mucho los niños y la educación, me presenté a la selectividad para hacer Magisterio. Este año terminé el grado de Educación Primaria. Al finalizar la carrera, me dije: ‘¿Y ahora qué?'. Sabía que quería montar mi escuela de baile, pero lo primero era acabar de formarme... hasta que llegó ese momento. Fue un poco locura porque justo encontré un local que se alquilaba, me encantaba la luz y estaba cerca de mi casa. Me gradué en junio y, a la semana, me dieron tres meses para llevar a cabo allí la obra antes de abrir», relata Paula, quien no ha aparcado los estudios a pesar de dirigir su propio negocio sino que por las mañanas prepara unas oposiciones.
Admite, agradecida, que a nivel logístico contó con la ayuda de su padre, que es carpintero, así como con el apoyo para la publicidad y márketing de un cámara —uno de sus mejores amigos (Carlos)—, y el respaldo de un profesor con larga experiencia para las clases de baile latino (Manolo). El 1 de septiembre abría sus puertas el centro. «Empecé con mucho miedo —reconoce—, pero la acogida fue muy buena y a las dos semanas ya tenía la mitad de las altas cubiertas. No me esperaba una bienvenida así. La gente me felicita por la iniciativa y están contentos de que Brión tenga al fin una escuela de baile y deporte».
Con un programa de actividades dirigido tanto a menores como a la tercera edad, en Dance & Fit planean ofrecer también campamentos de conciliación en temporadas vacacionales. «Aquí no solo enseñamos a bailar. Creamos un espacio seguro donde puedas soltarte, expresarte y bailar sin sentirte juzgado. Trabajamos con grupos reducidos y atención personalizada durante los 365 días del año... y puedes venir a probar nuestras clases gratis», subraya la brionesa.