La música más tradicional toma hasta el lunes el relevo del Millarock con actuaciones en Travesía do Porto
03 ago 2018 . Actualizado a las 23:06 h.El vecindario de O Milladoiro mantiene la tradición de abrir el mes de agosto con fiestas. No son las patronales porque este privilegio recae en San Xosé, pero sí son las que gozan de más arraigo entre los mayores, aunque esto no impide que el campo de la fiesta esté en el entorno del nuevo templo, que se transformará hasta el próximo lunes con varios conciertos por jornada.
Buena parte del recinto lo ocupa la variada oferta de atracciones para los más pequeños, con coches de choques, el tradicional saltamontes y estructuras hinchables para pasar un buen rato. El contrapunto para los mayores lo aportará la música.
El ambiente ya se caldeó en la noche del viernes con una nueva edición del festival Millarock, única actividad organizada por el Concello de Ames. El relevo llegará esta noche a partir de las 22.30 horas con las actuaciones del grupo Puzzle y Mar Dávila. Seguidamente saldrán al escenario Pili Pampín y el DJ Sony.
Pero no todo es diversión, ya que la fiesta tiene un origen religioso. Por ello, mañana domingo a las 12.30 horas se celebrará la tradicional procesión para recoger la imagen que durante todo el año está en la calle Viorneira para trasladarla a la capilla que lleva su nombre. En el pequeño templo se celebrará la tradicional misa a partir de las 13 horas.
Un vecino organizó en solitario los festejos con un presupuesto de 34.000 euros
José Gomís, compostelano de Vite afincado en O Milladoiro desde hace años, es la cara visible de las fiestas. En realidad es la única cara de la organización, porque este año asumió el reto en solitario de sacar adelante el programa con algunas colaboraciones.
Para Gomís no es una experiencia nueva, ya que en ediciones anteriores formó parte de la comisión de fiestas, pero este año asume toda la responsabilidad.
Su trabajo comenzó nada más concluir el programa del año pasado y en todo este tiempo consiguió un presupuesto de 34.000 euros. Lo logró, especialmente, con el apoyo de los comerciantes de O Milladoiro.