Alertan de la proliferación de casos de gastroenteritis en viajes del Imserso: «Xa non confío neles. Fun a Benidorm e volvín no avión con Fortasec»

O. P. SANTIAGO / LA VOZ

AMES

En el centro de la imagen, José Luis Vázquez y su compañera durante su reciente y accidentado viaje a Benidorm
En el centro de la imagen, José Luis Vázquez y su compañera durante su reciente y accidentado viaje a Benidorm

La firma que gestiona los viajes respondió ante la queja de un vecino de Ames que el episodio que vivió en Benidorm fue un brote viral con contagios entre usuarios

02 dic 2024 . Actualizado a las 21:38 h.

José Luis Vázquez, 74 años y vecino de Bugallido (Ames) fue profesor en Peleteiro. Desde su jubilación, comenzó a viajar por España con el Imserso: «Ao principio íamos unha vez por ano, pero despois estaba pendente de se quedaban prazas libres e podiamos ir tres veces nunha tempada». Sin ningún problema reseñable en más de una década. Pero la situación cambió en los últimos tiempos: «Fomos en febreiro á costa de Huelva, nuns hoteis preciosos, pero por pouco téñennos que levar a min e á compañeira en ambulancia, cunha gastroenterite tremenda». No fueron los únicos que la padecieron, porque a otras dos parejas gallegas amigas les pasó lo mismo. El pasado día 8 de noviembre, José Luis y su compañera cogían el avión en Santiago para disfrutar de una semana en Benidorm, pero de nuevo la enfermedad truncó el descanso: «Estiven cuns vómitos e unhas diarrea enormes, e tiven que ir alá ao médico». El diagnóstico: gastroenteritis de nuevo; la receta: beber mucho líquido «e que en tres ou catro días se me pasaba». Tuvo más suerte que otro viajero del grupo, de A Coruña, que fue trasladado a un centro sanitario en ambulancia con los mismos síntomas un par de días antes de caer él.

Asegura así que su problema dista de ser único: «Na consulta en Benidorm estabamos ese día unhas 15 persoas», todas con la misma sintomatología. Por eso cree que algo está pasando. Así que se puso en contacto con el Imserso para exponer la situación: «Chamei a Madrid e dixéronme que non sabían nada de que estivera sucedendo iso, e eu contesteilles que era raro pola cantidade de casos que se dan. Pero todos se pasan a pelota de uns aos outros, sen responsabilizarse do tema». Así que también contactó con la firma que gestiona los viajes, aunque la respuesta que recibió en su correo electrónico no le satisface.  Porque la empresa le asegura que la indisposición sufrida en la localidad alicantina se trató de «un brote viral, es decir, se ha transmitido de usuario en usuario», por lo que descartan que el hotel de cuatro estrellas en que se alojó y la empresa sean responsables directos del contagio. Destacan además que el establecimiento «cumple rigurosamente con todos los protocolos y certificados exigidos por los organismos sanitarios competentes».

Pero a José Luis no le convence la contestación, y considera que debe investigarse si hay una causa común en la reiteración en distintos puntos de España de episodios de gastroenteritis («non sei se o subministrador da auga é o mesmo, e pode ter relación»), del que él terminó de recuperarse en su casa tras otra consulta al médico en Bertamiráns: «No avión de volta tiven que tomar unha pastilla de Fortasec que me dou outra señora do grupo para poder vir máis tranquilo, porque é máis dunha hora de viaxe». No prevé volver a viajar con el Imserso por el momento: «Perdín totalmente a confianza. Falei con canto teléfono puiden, do Imserso e do ministerio, e todos se escaquearon con escusas. Nós non somos prioritarios, iso é evidente». Así que buscará opciones para disfrutar de termalismo social por Galicia: «Nos balnearios de aquí non nos pasou nunca nada. E ademais, coa ventaxa de estar a dúas horas da casa». Y seguirá indagando en causas más allá de los brotes virales que le indicaron desde la empresa de viajes. Activista social desde joven, tiene claro que dará la batalla: «Por unha parcelaria de monte en Bugallido traballei 26 anos, así que estou acostumado a bregar nestes temas».