Las VUT pasan, en ocho años, de 0 a más de 200 en Melide, Arzúa y O Pino

Natalia Rodríguez Noguerol
n. noguerol MELIDE / LA VOZ

ARZÚA

PACO RODRÍGUEZ

El concello arzuano se sitúa a la cabeza con un centenar, y 636 plazas

04 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Lejos ?muy lejos— quedan en el tiempo las imágenes de polideportivos municipales con la pista de juego ocupada por colchonetas y sacos de dormir para que nadie pasase la noche a la intemperie. En los municipios gallegos por los que discurre el Camino Francés, la apertura de recintos públicos para usos excepcionales lo asocia la memoria colectiva al amanecer turístico del primer itinerario europeo de peregrinaciones, principal sustento de un sector en el que la iniciativa privada camina de la mano del peregrino. Porque solo consultando las cifras de afluencia que deja, campaña tras campaña, la ruta jacobea se concibe que en concellos como Melide, Arzúa y O Pino se cuenten por cientos las plazas para pernoctar.

La oferta en los tres últimos municipios antes de alcanzar Santiago a través de los Caminos Francés, Primitivo y del Norte no es ajena al fenómeno de las viviendas de uso turístico (VUT) que irrumpieron en el sector, desajustando el mercado inmobiliario. Son el tipo de alojamiento con mayor crecimiento acumulado. En abril de 2017, no había ni la primera en O Pino. Ocho años después, suman 51, con una capacidad para dar cama a 315 personas. Los datos son de Turismo de Galicia, que, en su directorio de alojamientos turísticos regulados, sitúa a Arzúa como el primero de los tres concellos en el que más calaron las VUT. Es más, en ocho años, se situaron a la cabeza en número de establecimientos, y, casi, en plazas. Las viviendas de uso turístico suman en el municipio arzuano 105; las camas que ofrecen, 636. Es una cifra únicamente superada por el número de literas disponibles en los albergues: 926 en los 24 de gestión privada, y 116, en los dos de la Xunta. También en Melide irrumpieron con fuerza las VUT, aunque de manera más comedida. Son 63 y suman 387 plazas, de acuerdo con el último dato disponible en el registro de Turismo de Galicia.

El impulso del final de etapa

El municipio melidense no es final de etapa en el Camino Francés, que sigue siendo el itinerario más transitado, y eso repercute en una menor oferta global. Las plazas para pernoctar en establecimientos de gestión privada son 1.305, ascienden a 2.013 en O Pino, y se elevan a 2.706 en Arzúa. El municipio arzuano es prácticamente imbatible, y únicamente lo supera el metropolitano de O Pino en número de pensiones y de camas disponibles en ese tipo de alojamientos: son 25, con 474 plazas, frente a 54, con 664 camas.

La oferta de las casas de turismo rural es la única que se estanca en los tres municipios

Al margen de la eclosión de las viviendas de uso turístico, la oferta para pernoctar en los últimos 50 kilómetros del Camino Francés registró, desde 2017, un incremento progresivo en los diferentes tipos de alojamiento. En Melide, en Arzúa y en O Pino hay hoy, respecto a hace ocho años, más hoteles, pensiones y albergues entre los que elegir pasar la noche. Arzúa y O Pino incluso diversificaron la oferta con sendos cámpings, dotados de 166 y de 112 plazas, respectivamente.

La única excepción a esa tendencia son las casas rurales, que, en su día, fueron el soporte del sector turístico en la zona. La oferta se estancó, incluso en Arzúa, que llegó a ocupar el primer puesto en número de establecimientos de la provincia. Actualmente, suman 17, una menos que hace ocho años, aunque ese cierre no repercutió negativamente en el número de camas, que registró un ligero incremento al pasar de 188 a 219, según los datos de Turismo de Galicia. En Melide, hay hoy tantas casas rurales como hace ocho años: 6, concretamente. Ofrecen 66 plazas, diez menos que en 2017. Y en O Pino sucede algo similar. El número de casas rurales se mantiene en 4: las camas disponibles pasaron de 53 a 51.

La estabilidad en la oferta de casas rurales, también asociadas al turismo interior, no deja sino de poner de relieve la dependencia que del Camino de Santiago tiene el sector en la zona.