Y la plata nupcial es para... Alberto Romar

Olimpio Pelayo Arca Camba
o. p. arca SANTIAGO / LA VOZ

OROSO

El alcalde de Santa Comba disfruta con las bodas civiles y advierte a Doval: «Que se prepare Oroso, que aquí vén unha boa fornada de casamentos»

12 ago 2025 . Actualizado a las 14:55 h.

Ambos son jóvenes; ambos son alcaldes con mayoría absoluta desde mayo del 2023; y ambos disfrutan oficiando las bodas de sus convecinos. Uno es del PP y rige Oroso; y el otro es del PSOE y gobierna Santa Comba. El primero es el orosino Álex Doval, que suma 55 enlaces civiles, y el segundo el xalleiro Alberto Romar, que alcanza los 31. Es un dato que el socialista desconocía hasta que ayer mismo se lo comentaron los técnicos municipales, que repasaron la estadística casamentera de la localidad tras conocer los números de Doval: «E os meus son 31 casamentos civís, catro de aniversario de 50 anos e outros dous de 60 anos», comenta un Romar que lanza entre risas una advertencia a su homólogo: «Que se prepare Oroso, que aquí vén unha boa fornada de casamentos e poderemos superalos en calquera momento», dando así inicio a un incruento pique entre los dos municipios coruñeses. Él en todo caso añade una variable: «Tense que analizar tamén o porcentaxe de divorcios, porque hai que casalos ben casados». Admite que en su marcador, figura uno: «Caseinos e separáronse aos catro meses. A verdade é que non forzaron moito o amor».

Romar es una tarea que se toma muy en serio. Aunque pueden ejercerla todos los ediles de la corporación, solo en un par de ocasiones fue su compañera Noelia Baleato quien ofició. «A verdade é que me gusta realmente facelo, e hai días emotivos de verdade. Son xente coñecida e que entras na súa vida. En ocasións prepárolles cun amigo meu un vídeo con fotos dos noivos, con cancións que sei que lles gustan». Porque se reúne antes de la ceremonia con ellos y con familiares para preparar un pequeño discurso que nunca falta. Y ahí reconoce que tuvo un buen maestro: el juez de paz xalleiro Paco Arán, quien le dio las directrices de cómo articularlo antes de su primer enlace. Romar lanza entre risas que se está pensando incorporar monaguillos a las bodas, «e un que é imprescindible é el».

El alcalde de Santa Comba no escatima en guiños en estos enlaces nupciales, como sucedió el pasado sábado en la boda de sus amigos Nerea y David, cuando invitó al centenar de invitados a levantarse y entonar con él... «Qué bueno es el pan que tú nos das», una canción religiosa de la que cantó apenas un par de estrofas antes de aclarar al sorprendido auditorio que era una broma. Ceremonia religiosa no, pero sí llevó a cabo en algunas ocasiones el rito de la arena, en el que los contrayentes juntan en un único recipiente dos cuencos de arena que simbolizan sus experiencias vitales; y también el rito celta de los lazos, con la pareja con sus manos unidas por hilos o cuerdas.

La mayoría de las veces los novios lo invitan a comer pero, en una nueva coincidencia con Doval, no se queda más allá de los pinchos. «Tamén é verdade que algunha xente só quere asinar. Pero eu un pequeno discurso sempre lles leo, e a todos lles dou como recordo un pin do Concello de Santa Comba». Amén.