Manolo Caro pinta un retrato sobre la maternidad en «Sagrada familia»
PLATA O PLOMO
Najwa Nimri protagoniza esta nueva serie del director mexicano en torno a una madre que llega a un barrio de clase alta huyendo de su oscuro pasado
14 oct 2022 . Actualizado a las 08:43 h.El mexicano Manolo Caro, que triunfó en Netflix con su culebrón La casa de las flores, regresa a la plataforma con el estreno, este viernes, de Sagrada familia. Caro es el creador y director de esta nueva ficción sobre una madre de familia, Gloria (Najwa Nimri), que llega a un barrio de clase alta huyendo de su oscuro pasado. La maternidad, la familia y las apariencias son los temas centrales de esta historia, que cuenta también con las actrices Macarena Gómez y Alba Flores.
«La idea de la serie surge de observar y ver a tantas madres que están a mi alrededor y de un momento muy particular, de un amigo que había decidido tener a su bebé por vientre subrogado. Eso para mí abrió todo un debate con mi grupo de amigos de toda la vida. Me di cuenta de que todos opinamos de los demás, es un gran defecto», explica Caro en una entrevista a Europa Press.
El director, que también estrenó en la plataforma la serie Alguien tiene que morir, asegura que uno de los temas que más interés le genera es la familia. «Yo siempre digo que todos tenemos una familia disfuncional y, si lo entendemos desde ese lugar, podemos tener una relación mejor con nuestros padres y nuestros hermanos. El problema es cuando se venden como familias funcionales», opina.
«No solo me interesó que tratara cómo distintos personajes afrontan la maternidad, quizá me llamó más cómo Manolo ha querido hablar de las apariencias y de cómo la gente es distinta a como la ven. Creo que está muy bien reflejado», dice Macarena Gómez.
Para Najwa Nimri, Sagrada familia llegó como una oportunidad de interpretar un rol alejado de su registro habitual. «Lo que quería era pasar la prueba de ponerme en un papel cotidiano y hacer creíble una familia desde el personaje», relata la intérprete.
Por su parte, Álex García aseguró sentirse fascinado por el universo femenino de Caro. «Me gusta cómo trata las relaciones entre mujeres. Cuando leí el guion ya sabía la mitad del elenco que iba a estar y lo leí poniendo caras. Yo sobre todo quería estar con las mujeres», revela.
En la obra del director mexicano, la representación de la realidad LGTBI es una constante, también en esta serie. «Yo hablo de lo que conozco, de lo que me atañe y de lo que me mueve. No es una agenda, tenemos que aprender a dejar eso de lado. No hay una agenda, no hay un ejecutivo o un mánager que me diga ‘‘Manolo, tienes que meterlo porque es un público importante’’. Yo, siendo una persona abiertamente homosexual, me pasa mucho que el mes del Orgullo me llegan muchísimas ofertas, y yo digo: ‘‘Pero si yo no soy homosexual solo en junio’’. ¿Por qué tenemos que ponerle una cuota o una etiqueta a todo? Yo intento no hacerlo desde ese lugar. Se seguirá viendo en mis historias, porque es el día a día de mi sociedad, de mi comunidad, del grupo donde vivo», relata el creador de la producción.
«Algo que me parece precioso en la serie es que sube la cuota de diversidad, que no es más que subir la cuota de representación de la vida real. Que haya una actriz racializada, que es una de las vecinas, y un actor con diversidad funcional me parece que lo enriquece todo porque refleja la vida», reivindica Alba Flores. «Por la parte que me toca, siendo una mujer de color, es importante que haya representación. Gracias a Dios ahora mismo se está haciendo mucho más y es la razón por la que puedo estar aquí trabajando en España», agrega Ella Kweku.