Rouco arremete contra los sacerdotes de la llamada parroquia roja

La Voz EFE | MADRID

SOCIEDAD

10 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

El cardenal y arzobispo de Madrid, el gallego Antonio María Rouco, expresó ayer duras críticas contra los sacerdotes de la parroquia de San Carlos Borromeo, al recordar, durante su homilía del Corpus, que «profanar la Eucaristía supone un desprecio de la muerte del Señor». El cardenal añadió: «Hemos de lamentar con profundo dolor los abusos y profanaciones de este sacramento de los que hemos sido testigos recientemente en nuestra diócesis y que apartan a sus autores de la comunión en la fe y en la vida eclesial, que es el único marco válido de celebración de estos sagrados misterios». Rouco afirmó que «utilizar la celebración de la Eucaristía en contra de la misma tradición en la que ha tenido su origen es, además de un acto carente de sentido y de valor teológico, un triste y grave atentado contra la comunión eclesial que nace de la obediencia a la fe y al mandato apostólico que procede del Señor. Quienes no tienen fe injurian a la comunidad creyente simulando participar de sus misterios; y quienes creen rompen la comunión que Cristo quiso para su Iglesia». En alusión concreta al párroco y sacerdotes de la parroquia roja, recordó las palabras de Benedicto XVI en su exhortación apostólica Sacramentum Caritatis: «Es necesario que los sacerdotes sean conscientes de que nunca deben ponerse ellos mismos o sus opiniones en el primer plano de su ministerio, sino a Jesucristo». La parroquia de San Carlos Borromeo, en el barrio madrileño de Entrevías, fue clausurada por el Arzobispado de Madrid, a pesar de lo cual ha seguido celebrado misas, con el apoyo de personajes como José Bono o Pedro Zerolo.