María Freyre regresa a Cibeles con una colección propia y la idea de reflotar talleres gallegos

La crisis, que sacude con fuerza el mundo de la moda, se ha cebado con los viejos talleres de costura gallegos, asfixiados también por la competencia barata: China. Muchos han cerrado, otros se tambalean en un inestable equilibrio que arrasará el próximo Klaus económico. Ayudar a reflotarlos es el empeño de María Freyre. Esta diseñadora coruñesa, esposa de Antonio Pernas, debutará a lo grande en Cibeles (del 20 al 24 de este mes), donde presentará su primera colección, producida íntegramente en Galicia.

Reclutada a última hora por la pasarela española de referencia, Freyre se suma a José Castro, Kina Fernández, María Barros y Marta Montoto para el espectacular desembarco de Galicia en el otoño-invierno del Madrid Fashion Week, donde tendrá cinco representantes, cuatro más que en la edición precedente.

Cibeles asistirá al nacimiento de la primera colección de Freyre una vez desligada de la firma Antonio Pernas, pero también al de un proyecto hondamente vinculado a Galicia. «Quiero una producción gallega -sentencia la diseñadora-. Mi intención es recuperar todos los talleres de costura que pueda», un objetivo que vincula a la calidad del producto, que ha de ser «lo más alta posible, como exige, por ejemplo, la línea de cóctel que he creado».

La razón está clara: «Esa idea obliga a los talleres a ser muy cuidadosos, y ese nivel alto anula la competencia china, que se basa fundamentalmente en el precio». Es decir, que diseño más calidad es sinónimo de Galicia y antónimo de Lejano Oriente. «Es preciso ayudar a los talleres gallegos. Muchos han cerrado y otros lo están pasando muy mal. Hay toda una vida ahí dentro y gente a la que tengo mucho cariño, así que deseo una moda íntegramente nuestra», sentencia.

Reencuentro con Madrid

María Freyre creó estilo de la mano de Antonio Pernas hasta septiembre del 2006. Su despedida coincidió precisamente con un desfile en Cibeles. A su término, los diseñadores le tributaron un cálido homenaje.

Se desvinculó entonces de la firma de su marido, adquirida por Caramelo, y creó la empresa Now By María Freyre, marca con una filosofía moderna. Sus prendas son clásicos revisados con un toque de frescura, equilibrio y mezcla de estilos, colores y tejidos.

Dos años y medio después de aquella despedida, la diseñadora gallega se reinventa en Cibeles. «Entonces estuve al borde de la lágrima, así que el retorno va a ser emotivo, pero al mismo tiempo llego a Madrid con la serenidad de la experiencia. Sé lo que no se puede hacer allí», afirma con gran seguridad.

Sobre la pasarela mostrará una colección de vestidos vintage, con satén, jacquards , tules..., una colección que trabaja el palabra de honor, el cuello chimenea o los hombros asimétricos. Habrá brocado, raso, terciopelo y encaje en los tejidos, con predominio del blanco y el negro, y tonos más audaces, como plata, oro, coral o lila.

Barato y más ético

Convencida de que producir en Galicia no significa encarecer el producto, Freyre anuncia una colección con precios bajos. «Me apetece hacerlo así por una cuestión ética en tiempos de crisis. La moda se ha encarecido demasiado -dice-, y creo que se puede trabajar con calidad y llegar al mismo tiempo a más gente. Quiero disfrutar del placer de hacer cosas buenas y baratas, estrechar los márgenes de beneficio para que todo el mundo pueda llegar. No tiene sentido que se pongan unos precios altísimos y que dos meses después aparezcan rebajas del 70%. Es absurdo».

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