Decenas de miles de personas claman en Madrid contra el aborto

Alejandro Posilio

SOCIEDAD

Numerosos dirigentes del PP acudieron al acto de protesta, aunque el partido no secundó la convocatoria

18 oct 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Decenas de miles de personas se manifestaron ayer en el centro de la capital en contra de la ley del aborto. Los gritos y canciones en favor de la vida y en contra del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, fueron lo más escuchado en la protesta.

La movilización comenzó a las cinco de la tarde en la Puerta del Sol. Una gran pancarta con el lema de la marcha, «Cada vida importa», lucía en la cabecera, en la que aparecían representantes de las 42 asociaciones pro vida que convocaban, junto con caras más conocidas. Entre estas figuraban las de líderes del PP, como el ex presidente José María Aznar, la secretaria general, María Dolores de Cospedal, o sus compañeras María San Gil y Ana Mato.

Muchas de las pancartas aludían directamente al responsable del Ejecutivo español o a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, y en ellas se leía: «Si vosotros nacisteis, por qué no nos dejáis a nosotros». Pero también había otras más inocentes, como «No al aborto. Tengo 11 hijos», o más duras, como «Aborto: exterminio silencioso» o «Paremos el holocausto del siglo XXI». Incluso hubo quien se acordó de la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, la integrante del Gobierno que ha defendido la reforma de la ley actual: «Bibiana, ignorante, la vida es importante».

Mientras que el grito más repetido fue «Zapatero, dimisión», la megafonía emitía canciones vitalistas de grupos como Cold Play, The Who o Dire Straits, o del cantautor español José Luis Perales. Las melodías amenizaban la marcha de los presentes, entre ellos familias enteras, y en particular, de los cientos de miles de jóvenes que gritaban en contra de la interrupción voluntaria del embarazo. En ese grupo estaba María, una adolescente llegada de A Coruña que lo tiene muy claro: «He venido con mis padres y unos amigos a defender la vida. El aborto es una monstruosidad. La sociedad no lo puede permitir, y estamos aquí para decirlo muy alto».

Hora y media después del inicio de la marcha, la cabecera ya había llegado a la Puerta de Alcalá, donde desde un escenario se leían mensajes de adhesión de asociaciones pro vida de todo el mundo. Después tomó la palabra el actor mexicano Eduardo Verastegui, que explicó el papel principal que debe cumplir el hombre cuando una mujer se plantea la posibilidad de abortar. Los organizadores repartieron un manifiesto entre los participantes en el que se podía leer que la reforma de la ley «supondría la desprotección total de las dos víctimas del aborto: el niño no nacido, que carecerá de toda protección jurídica, y la mujer, abocada al aborto sin alternativas posibles».

Benigno Blanco, presidente del Foro Español de la Familia, aseguró que «esta protesta no se dará por cerrada hasta que no haya ni un solo aborto en España».