El mercado oriental es el primer cliente de marcas como Rolls Royce o Bentley
15 ene 2012 . Actualizado a las 06:00 h.Esta semana sorprendía la noticia de que, a pesar de la crisis de ventas en Europa, la marca de lujo Rolls Royce había conseguido en el 2011 el récord de producción de toda su historia ya centenaria.
Sin duda, en este sorprendente dato tiene mucho que ver el mercado chino, ávido de artículos de lujo, incluidos, claro está, los automóviles.
De hecho, en el 2012 las dos marcas más carismáticas de este segmento, Rolls Royce y Bentley, tendrán en el mercado chino su mejor cliente. Precisamente esta última marca, perteneciente al grupo Volkswagen, colocará este año en aquel país más de 2.000 coches, todos ellos por encima de los 190.000 euros de precio.
La fiebre de los millonarios chinos por este tipo de coches ha llevado a estas marcas a realizar personalizaciones específicas para ese mercado, donde los colores más chillones y los interiores totalmente revestidos de cuero y maderas nobles, con bordados de dragones, son muy apreciados.
Modelos como el Bentley Continental GT o los Rolls Royce Phantom y Ghost, que apenas se pueden ver en ocasiones especiales por la City londinense o por la costa azul francesa, son imágenes ya habituales delante de las tiendas de Gucci o Cartier como Pekín o Shanghái.
Las previsiones son todavía más optimistas de cara a este 2012, ya que se cree que estas marcas mejorarán sus ventas en un 20 % en el mercado chino. No solo las marcas de superlujo triunfan, ya que en un segmento por debajo, Audi con casi 300.000 unidades, BMW con 200.000 y Mercedes con algunas menos, se han puesto las botas.