Galicia acude a su cita con el mes más festivo

Ángel Palmou

SOCIEDAD

Más de setecientas celebraciones llenan de actos lúdicos el calendario de las próximas semanas

31 jul 2012 . Actualizado a las 15:03 h.

Los amantes de las fiestas tienen en Galicia un destino ineludible donde dar rienda suelta a su pasión en agosto. Romerías, conciertos, historia, gastronomía y otros motivos diversos servirán de excusa perfecta para entregarse a los placeres de un calendario que el año pasado, según Turgalicia, ofrecía un total de 727 citas y que en esta ocasión, pese a la crisis, volverá a rondar esa cifra. Mañana, para abrir boca, tocará elegir entre sumergirse en una romería muy peculiar, la de San Fins do Castro (en Cabana), disfrutar en Ribeira de un clásico del pop (La Guardia) o en A Coruña de uno de sus relevos generacionales (La Oreja de Van Gogh), o rendirse en Cambados a un artista ya universal, Julio Iglesias.

Música para todos los gustos

El cantante de origen gallego será una de las grandes estrellas de un verano no tan pródigo en artistas internacionales como en años anteriores, pero sí prolífico en propuestas. Los conciertos de Tom Jones, que tras la cancelación de la semana pasada volverá a Compostela el 27 de agosto, y de Mika, que regresará a Galicia el día 9 como cabeza de cartel del Noroeste Pop Rock de A Coruña, están llamados a congregar a numeroso público. Quienes busquen más contundencia podrán dirigirse este fin de semana a Viveiro para entregarse a los tres días del Resurrection Fest, o acudir la próxima semana a Cambre para saltar en el transformado Brincadeira Rock. Serrat y Sabina, por partida doble (en Vigo y A Coruña), Ana Belén y Bunbury (en la capital herculina) y Raphael (Cambados), son otras de las caras más conocidas de una agenda musical muy activa al amparo de las fiestas de las ciudades y en la que el rock y el folk gallego tendrán también su protagonismo. La Festa da Carballeira (en Zas), el Felipop (Limodre, Fene), O Marisquiño (Vigo), el SonRías Baixas (Bueu) y el Con V de Valarés (Ponteceso) integran la nómina de festivales.

Despliegue gastronómico

Serán muchas las citas que se dedicarán en cuerpo y alma a cantar las delicias de la gastronomía gallega. Este fin de semana, Cedeira, Rinlo (Ribadeo) y Valdoviño presumirán de percebes; Burela y Castrelo de Miño hará lo propio con el bonito y la anguila, y Padrón tratará de desentrañar el viejo misterio de por qué unos pimientos pican y otros no. El mejillón (Lorbé y Cabo de Cruz), la empanada (Bandeira, Monforte y Chantada), las navajas (Aguiño), el marisco en general (A Pobra) y el pulpo (Porto do Son y, especialmente, O Carballiño) son otros productos homenajeados, al igual que su principal acompañamiento, el vino: en Cambados rendirán tributo al albariño y en Monterrei y en Valdeorras, a sus propios caldos.

Historia y leyendas

Si lo que le gusta a uno es la historia y está dispuesto a admitir alguna licencia tampoco le faltarán lugares donde repasar el devenir de Galicia a través del tiempo. La Festa do Esquecemento de Xinzo, la Romana de Sober, la Romería Vikinga de Catoira, la Festa Normanda de Foz, la de la Istoria de Ribadavia, y los mercados medievales de Ferrol, Muxía y Mondoñedo serán algunos de sus destinos.

Tradiciones multitudinarias

Un Naufraxio milagroso (Laxe), un Globo gigante de papel (Betanzos), una celebración consagrada al agua (Vilagarcía) y un puñado de romerías más inclinadas al desenfreno que a la devoción, como la Jira Os Caneiros (Betanzos), el Naseiro (Viveiro) y la Maruxaina (San Cibrao) son solo una pequeña representación de la diversidad festiva gallega, que también quedará reflejada en la multitudinaria procesión del Cristo da Victoria de Vigo o en la pirotécnica Batalla Naval de A Coruña. Los toros, en esta última ciudad y en Pontevedra, y los barcos de la regata Tall Ships Races, que recalarán en Cíes antes de arribar a la capital coruñesa, serán otras de las atracciones de un mes pleno de color y diversión.