Lo Que de Verdad Importa vuelve a promover valores en A Coruña

D. Vázquez / P. Portabales A CORUÑA / LA VOZ

SOCIEDAD

Cientos de personas abarrotaron el Palacio de Congresos Palexco de A Coruña para escuchar las historias de superación.
Cientos de personas abarrotaron el Palacio de Congresos Palexco de A Coruña para escuchar las historias de superación. césar quián< / span>

Ibarra, Corretja y Font expusieron sus historias de superación

20 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Superación, perseveración, responsabilidad, valentía, tesón, meta, compromiso o sacrificio fueron palabras que el público, mayoritariamente estudiantil y que llenó el Palacio de Congresos Palexco de A Coruña, utilizó para resumir la vida del deportista Alex Corretja y que podrían servir también como resumen de los valores que se expusieron ayer en la quinta edición en la ciudad del congreso Lo Que de Verdad Importa.

Fue una edición marcada por el recuerdo y homenaje a la fallecida María de Villota, que había participado en una edición anterior, y también para incidir en la importancia del esfuerzo personal para que cada uno halle su meta, según destacó Felipa Jove, presidenta de la Fundación María José Jove y presidenta de honor del congreso, que abrió esta cita, junto con la conselleira Beatriz Mato; el presidente de la Diputación coruñesa, Diego Calvo; y el alcalde coruñés, Carlos Negreira.

En una puesta en escena en la que se busca la interacción con el público, para esta edición se eligió a la modelo Sandra Ibarra y a los deportistas Alex Corretja y Jorge Font para relatar sus experiencias vitales, que estuvieron acompañados por el Hermano mayor Pedro García Aguado, que aportó la parte pícara a la presentación.

El relato impactante de Ibarra, relatando cómo superó la leucemia la emocionó hasta a ella. «Nunca soñé tener cáncer», reconocía y asumía que su suerte ha sido, en las dos ocasiones que ha padecido la enfermedad, «tener mi seguro en vida en casa: mi hermano», que donó médula para los trasplantes. Apuntó como el peor efecto secundario de la enfermedad «la incertidumbre» e incidió en que «en la adversidad también hay vida». «El filtro de la vida que te da el cáncer es vivir las cosas como la última vez», apostilló, al mismo tiempo que, parafraseando a Ramón Sampedro, reconoció que, en su caso, «las cuentas de la felicidad, me han salido». Ibarra, que fue la encargada de defender los valores de optimismo y esperanza, aprovechó su participación por hacer campaña contra el tabaco, a favor de la filantropía y por la puesta en marcha de un plan nacional del cáncer.

Sin renunciar a pelotear en el escenario, Corretja relató su particular periplo de «pringado» a número 2 mundial y a ser campeón absoluto de España en todas las categorías. Reconoció que lo consiguió a base de «actitud», de no coger atajos y de perseverancia. Defendió el lema «ahora o nunca» como motor para lograr objetivos y más allá de los sacrificios que tuvo que hacer, agradeció el haber estado 13 años de profesional. Sin aires de divismo, alabó la valía de Nadal, al que puso como «ejemplo de saber ganar y perder».

Aunque todas las charlas lograron la complicidad del público, la intervención de Jorge Font, un esquiador acuático que llegó a ser campeón mundial y que quedó tetrapléjico, fue quien lo puso en pie. Participaba en el congreso representando la humildad.

Este mexicano defendió la «tacoterapia» e incluso se permitió promover la versión «tapaterapia» para España, que se resume en salir con unos amigos a tomar algo y, mientras tienes la boca llena, escucharlos. Font, que agradeció el apoyo recibido de su esposa, apuntó que quien puede reírse sí mismo puede tomar perspectiva y distancia con el problema.