París se rinde a las redes sociales

maría piñeiro REDACCIÓN/ LA VOZ

SOCIEDAD

PATRICK KOVARIK | AFP

Chanel desfiló en una «brasserie» y Valentino apostó por Hollywood

11 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

En el mundo visual de las redes sociales la moda no se puede conformar con ser solo eso. Por eso los diseñadores ofrecen desfiles que son más que un pase de modelos: un espectáculo para ser captado y contado en el momento. El público no aplaude, saca fotos, y alimentar a esa bestia parece más complicado que presentar cada seis meses una colección de hechuras y telas distintas.

Ayer Chanel ofreció un desayuno muy especial. Como cada cita fue en el Grand Palais y la mente hiperactiva de Karl Lagerfeld -que ya montó en esa estructura cristalina un supermercado, una galería de arte y una manifestación- se decantó por una brasserie. Con el nombre de la fundadora Gabrielle, no le faltaba detalle, de cruasanes a huevos pasados por agua pasando por periódicos y hasta champán, que París es París.

Para que se viese que el decorado no era accidental, Lagerfeld presentó faldas atadas como un delantal, dejando la parte de atrás a la vista, con unos leggins u otra falda. Con la cadencia blanco-negro tan de la casa, por entre las mesas y hasta la barra iban llegando modelos con faldas y chaquetas acolchadas -como los famosos bolsos de la firma-, abrigos y trajes con lana Chanel, lentejuelas haciendo mosaicos, tejidos plásticos que jugaban al despiste y parecían servilletas, mucha organza (el origami sobrevoló la colección) y hasta alguna parodia del propio Lagerfeld. Por tener, hasta tenían pajaritas las modelos, que llevaban el pelo recogido con una cinta. Una última vuelta de tuerca: un bolso que imitaba la carta de un restaurante.

¿Cine o moda?

Por su parte, Valentino (Maria Grazia Chiuri y Pierpaolo Piccioli) optó por algo menos sutil para llamar la atención. En su desfile participaron los actores estadounidenses Ben Stiller y Owen Wilson como personajes de Zoolander. Enfundados en trajes de llamativos motivos, hicieron las delicias del público. Su presencia la explicaba la crítica Suzy Menkes en su Instagram: Zoolander 2 se grabará en Roma y participan Chiuri y Piccioli.

El resto de su colección de Valentino siguió apostando por las referencias estéticas ortodoxas con guiños al lejano oriente, a la rica China, tanto en hechuras, como en modelos y en dibujos. Las faldas se alargan, las transparencias dibujan el cuerpo y Valentino regresa a sus básicos: vestido rojo, encaje negro y plumeti casi blanco.