La Pantoja, ¿madre desesperada o cantaora dando el cante?

Martín Bastos

SOCIEDAD

Oscar Vazquez

Tan gordas debieron de ser sus palabras en televisión que su hijo Kiko acabó llamando al programa para pedirle que ya estaba bien, que colgara el teléfono

15 sep 2018 . Actualizado a las 12:44 h.

No veo Sálvame. Perdónenme, pero no puedo con el programa. Pero ayer, muy a mi pesar, no pude quedarme al margen de la intervención que hizo por teléfono Isabel Pantoja para hablar de la relación que mantiene con su hija Chabelita, quien acaba de entrar como concursante en Gran Hermano Vip. No sé qué pensar. ¡Ayúdenme! ¿Sus palabras eran las de una madre desesperada o las de una cantaora que aparcó su arte para dar el cante en un programa del corazón? Tenían que haberla escuchado. Aseguró que se enteró solo una semana antes de que su hija iba al programa, pero al menos de ese modo sabría donde estaba. «Ahí no le van a hacer daño», dijo, al tiempo que aireó que no la había perdido cuando cumplió dieciocho años cuando se fue embarazada de casa, la perdí cuando a los catorce se le escapó a la que fue mi empleada de hogar. Pero aún fue más dura. Como recoge la revista ¡Hola! en su edición digital explicó: «No acepto que llegue a casa a las siete, nueve u once de la mañana. De una forma u otra. Eso lo sabe ella, sabe que yo le voy a reñir, pero está con una persona que no lo hace porque no es una buena persona. Si fuera una buena persona le daría buenos consejos y le diría: ‘‘Tienes un hijo de cuatro años. Tienes 22 años’’». Tan gordas debieron de ser sus palabras que su hijo Kiko acabó llamando al programa para pedirle que ya estaba bien, que colgara el teléfono. 

Tana Rivera

¡Qué pena! Porque de ser ella y poder elegir habría preferido que mi puesta de largo fuese en el palacio de Dueñas, no en el cortijo La Pizana. Pero no tuve puesta de largo, ni baile del instituto, ni ná de ná. Además, la fiesta era para ella, Cayetana Tana Rivera, la hija de Eugenia Martínez de Irujo y el torero Francisco Rivera que, después de que sus padres optaron por aplazarle la fiesta tras suspender la selectividad, ayer logró reunir a cientos de amigos llegados en autobús al cortijo que su abuela regaló a su madre cuando se casó con el torero. ¡Recuerdo lo mucho que la duquesa quería a su yerno Cayetano! Debieron de pasarlo bomba en una fiesta al más puro estilo andaluz. ¿Detalles del traje? Ni idea. Solo recuerdo el vestido negro con volantes que llevó su madre en Dueñas, rompiendo la costumbre de que las debutantes -¡que nombre tan rancio!- tienen que ir de blanco.

Cumpleaños de la reina

La que también está hoy de celebración, pero por otro motivo, es la reina Letizia. Cumple 46 años con un aspecto genial. Eso que ayer le llovieron las críticas por no haberse dado cuenta de que las luces de los fotógrafos podrían hacer que se viera que llevaba un sujetador deportivo. ¡Qué error!

Marc Jacobs o el conejo de alicia

No lo puedo negar. ¡Me encanta! Ayer Marc Jacobs pidió disculpas porque su intervención en la pasarela de Nueva York se retrasó 75 minutos. Lo hizo colgando en su cuenta de Instagram una foto suya disfrazado del conejo de Alicia. Y dio explicaciones.