Miles de gallegos reciben mascarillas en las paradas de autobús y en los polígonos industriales
SOCIEDAD
Cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado entregan en mano el material de protección
13 abr 2020 . Actualizado a las 14:25 h.Con la vuelta al trabajo de profesionales de sectores no esenciales, especialmente la contrucción, y la recomendación del Gobierno del uso de mascarillas en lugares públicos, desde primera hora de la mañana cuerpos y fuerzas de seguridad están repartiendo este material de protección en diferentes puntos de Galicia. El delegado del Gobierno, Javier Losada, declaró a primera hora de la mañana que espera que «las 602.000 mascarillas enviadas a la comunidad y cuyo reparto empieza hoy lleguen al mayor número de trabajadores y trabajadoras para mejorar la protección frente al COVID-19». Losada explicó que «desde esta mañana se están repartiendo en los principales nodos de transporte público de las cuatro provincias gallegas». Asimismo, indicó que «lo estamos haciendo en una acción coordinada con las subdelegaciones del Gobierno y con la colaboración de la Policía Nacional y Guardia Civil, así como con el apoyo de las policías locales y agrupaciones de protección civil de los ayuntamientos».
En A Coruña el reparto se realizó en las paradas de transporte público, como la ubicada en la plaza de Pontevedra o el mercado de Monte Alto; en la plaza de Mina, en la entrada de la autopista en O Burgo, en la rotonda bajando a Sada ya en el límite con Oleiros o, por ejemplo, en la entrada del polígono de Bergondo, en el de Sabón y en el puerto de Lorbé los efectivos de Guardia Civil, Policía Nacional, Protección Civil y policías locales ya entregan las mascarillas a los ciudadanos.
En Vigo, los agentes comenzaron el reparto de mascarillas a las 7.00 horas en la plaza de América, siguiendo las instrucciones de la Subdelegación del Gobierno. Los funcionarios entregan una protección individual a todos los peatones que van desprovistos de material , lo mismo que los ocupantes de vehículos donde viajan dos personas o los pasajeros del bus de Vitrasa, y en los taxis.
En Ourense, hubo poca gente en el transporte urbano en la primera jornada tras el período de hibernación. Pero muchos de ellos ya con mascarillas, gracias al reparto que están haciendo agentes de la Policía Nacional desde primera hora de este lunes. Los agentes, tal y como había informado la Subdelegación de Gobierno que harían, acudieron a las paradas de autobús de la Alameda, en la capital ourensana, y una vez allí se subieron a los vehículos para distribuir el material de protección, fundamentalmente a pasajeros pero también a algún chófer. Además facilitaron mascarillas a las personas que a primera hora de la mañana circulaban por ese tramo de Progreso, rumbo a sus puestos de trabajo, y así se lo solicitaron.
El reparto de mascarillas entre los usuarios del transporte colectivo comenzó esta mañana en Pontevedra en los polígonos industriales y los puertos de Marín y Vilagarcía. En el caso de la provincia de Pontevedra, la distribución se está realizando en las estaciones del tren y del autobús de la capital provincial y de Vigo, así como en las lanzaderas de bus de ambas ciudades, como por ejemplo, la pontevedresa Praza de Galicia, principal nexo de conexión del autobús entre la ciudad y Marín. Asimismo se repartirán mascarillas entre los trabajadores a la entrada de los polígonos de O Vao, O Campiño y Monte Porreiro, en el municipio de Pontevedra, así como los de Valladares, Caramuxo, Aeropuerto y Zona Franca de Vigo. Desde la Delegación del Gobierno se precisó que también se distribuirán mascarillas a las personas que retoman su actividad laboral en los accesos al puerto de Marín, así como en las estaciones de Vilagarcía, en sus polígonos y en el acceso al puerto.
En Lugo ocurrió lo mismo que en el resto de ciudades y los repartos se hicieron en las paradas de autobuses. Lo que sí preocupó en esta primera jornada de regreso al trabajo, fue la decisión del Gobierno respecto a limitar algunos trabajos en la construcción. El gerente de la Asociación Provincial Empresarios de la Construcción de Lugo (APEC),Eugenio Corral, asegura que hay más de 3.000 trabajadores afectados en la provincia y explica que en estos momentos están estudiando con los servicios jurídicos la alternativa más viable ya que el pasado día nueve terminó el permiso retribuido recuperable, «por lo que toda esta gente se queda en un limbo, sin saber si podrá pagar las facturas el mes que viene». A lo largo de esta mañana decidirán si es factible que las empresas se acojan a un ERTE. «La situación es dramática y esto afecta a todos, autónomos incluidos. El decreto se publicó ayer poco antes de las diez de la noche. Y muchos trabajadores y empresas, que tenían todo preparado, se vieron obligados a suspender inmediatamente su actividad», explica Corral, que también cuenta que el decreto tiene carencias que están tratando de resolver.
Las policías nacional y local de Santiago cubrieron a primera hora de la mañana los principales puntos del transporte público para entregar mascarillas a todas las personas que no las tenían. La demanda fue escasa porque también era escaso el movimiento de viajeros y transeúntes. Por ejemplo, a las 8.35, en la estación del tren, dos policías nacionales y un municipal esperaban poder entregar mascarillas a quienes llegaban en el tren procedente de Ourense, pero solo se bajó una joven que rechazó este elemento de protección porque, les dijo, ya llevaba una en la mochila.
En las dos paradas de autobús de la praza de Galicia, varias dotaciones de ambos cuerpos policiales también estaban a disposición del público usuario del autobús e incluso de cualquier peatón que pasaba por la zona sin llevar mascarilla, y que se las pedían. También en la estación de autobuses, de donde dos dotaciones policiales se marcharon pasadas las nueve de la mañana sin agotar, ni mucho menos, su disponibilidad de mascarillas, ya que el movimiento en la terminal compostelana, al igual que en la de tren era escasa, idéntica a la de las semanas anteriores del estado de alarma en cuanto a servicios operativos, y poco más en lo que respecta a movimiento de viajeros pese a que este lunes volvieron al trabajo muchas personas también en Compostela.
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