Personal del centro dependiente de la Xunta trabaja en la reapertura desde el lunes
16 may 2020 . Actualizado a las 11:45 h.Todos los libros prestados por la biblioteca pública de Lugo entrarán en una particular cuarentena que los mantendrá aislados y sin posibilidad de volver a circular durante 14 días. Esta es una de las medidas que se ultiman desde el pasado lunes, cuando las bibliotecas recibieron el permiso para reabrir, coincidiendo con la fase 1 de la desescalada diseñada por el Gobierno. Sin embargo, las que dependen de la Xunta se mantienen aún cerradas, centradas en los preparativos para una reapertura con garantías. En el caso de la de Lugo, con más de 4.000 metros cuadrados, requiere de un protocolo exhaustivo para reducir el riesgo de contagio por coronavirus.
«La apertura de la biblioteca aún no está decidida, no tiene fecha, pero estamos preparándola, ya tenemos los equipos de protección para que sea segura y libre de covid-19 tanto para los usuarios como para los trabajadores», señala una fuente del centro público de Lugo.
Esta misma fuente afirma que trabajan en «una primera fase», en la que «el préstamo sería bajo demanda», es decir, el usuario no puede acceder a ninguna de las salas donde los libros se encuentran ordenados, sino que tiene que solicitarlo por alguna de las vías de contacto con la institución para que el personal de la misma se lo facilite y pueda acudir a recogerlo a la biblioteca.
Dos semanas de cuarentena
En el protocolo con el que se trabaja para poder retomar la actividad, todos los libros prestados -antes de la declaración del estado de alarma el 14 de marzo o en este nuevo escenario- deberán pasar al devolverlos una «cuarentena» de dos semanas.
Con esta medida se pretende evitar que los títulos que hayan podido entrar en contacto con el virus puedan convertirse en transmisores del mismo.
Los empleados de la biblioteca han dedicado esta semana a ese «trabajo preliminar» para perfilar los protocolos con los que poder reabrir al público, que incluyen el uso de señales que marcan la distancia de seguridad necesaria para ser atendidos, los equipos de protección con los que contarán los trabajadores, así como la colocación de dispensadores de gel desinfectante y de mamparas protectoras. «Para el lunes ya tenemos casi todo preparado, pero sin apertura al público», señalan fuentes del centro, que con sus más de 4.000 metros cuadrados quiere evitar a toda costa convertirse en «un foco peligroso de contagio».
Lentos, pero seguros
«Vamos un poco lentos, pero queremos hacerlo bien para que no haya riesgo ni para los trabajadores ni para los usuarios», subraya una de las voces del centro que trabaja desde el lunes en las tareas para poder reabrirlo.
El Gobierno incluyó los espacios para la lectura y el préstamo de títulos entre las actividades con afluencia de público habilitadas en la fase 1, que comenzó en Galicia el pasado lunes día 11 de mayo.
Sin embargo, las labores para que los centros se adapten y puedan cumplir de manera escrupulosa con los nuevos protocolos sanitarios fijados a nivel estatal obligaron a posponer el reencuentro inmediato con el público. La Consellería de Cultura señaló ayer que «están ultimando a reapertura», aunque todavía no hay una fecha marcada en el calendario.