Portugal se confina un mes, pero con los colegios abiertos

Begoña Íñiguez LISBOA / CORRESPONSAL

SOCIEDAD

PEDRO NUNES / Reuters

El encierro comenzará este viernes a las 00.00 horas

14 ene 2021 . Actualizado a las 14:08 h.

El primer ministro luso, el socialista António Costa, desveló los detalles (tras el Consejo de Ministros Extraordinario y de la luz verde de todos los partidos políticos y del presidente de la República, Rebelo de Sousa) del confinamiento que entrará en vigor en Portugal a las 00.00 horas de este viernes. A diferencia de lo que ocurrió entre el 16 de marzo y el 4 de mayo, todos los ciclos educativos permanecerán abiertos en Portugal.

El jefe del Gobierno de Lisboa ha justificado la decisión de no cerrar los colegios, que pedían los médicos y los especialistas, diciendo: «Se ha demostrado que las escuelas y los colegios no son lugares de contagio preocupantes y sería peor cerrarlos, para los escolares y para la sociedad en general, como ya se comprobó en el primer confinamiento». «No podemos sacrificar otra vez una generación», dijo el primer ministro portugués, que señaló que, consultados los especialistas y la comunidad educativa, «los pros superan a los contras».

Costa ha garantizado que «se reforzará la seguridad y la realización de test de antígenos en las escuelas y portuguesas de todo el país». La única excepción al confinamiento general se producirá el 24 de enero, día de elecciones presidenciales, para que los portugueses puedan votar.

Permanecen abiertos los supermercados, panaderías, las fruterías, pequeñas tiendas de alimentación, gasolineras, farmacias y otros comercios esenciales. Los cafés y restaurantes trabajarán solo con el servicio de comida a domicilio. Cierran también los gimnasios, peluquerías, y los establecimientos culturales y de ocio.

Teletrabajo y multas

António Costa repitió en varias ocasiones: «No podemos anestesiarnos y acostumbrarnos a más de más de 100 muertos diarios y 10.000 nuevos positivos cada 24 horas, y a la saturación de los hospitales y de las ucis», añadiendo: «Por dicho motivo imponemos el teletrabajo, aunque no esté de acuerdo el trabajador y su entidad patronal, y duplicaremos las multas a quien no cumpla la ley o no lleve la mascarilla».

El primer ministro luso reconoció que «difícilmente la curva habrá bajado hasta donde queremos en un mes, porque la situación es muy preocupante y el número de infectados muy alto».

El jefe del Gobierno portugués ha garantizado la continuidad de las ayudas y de los ERTEs a los sectores más afectados, como ocurrió durante el primer confinamiento. Al final de su intervención ha adelantado también que se permitirán las misas, con el aforo que determinen las autoridades sanitarias, y los funerales, con el aforo de la primera onda.

El confinamiento llega en el momento «más peligroso» de la pandemia, avisó Costa, que recordó las cifras que el país ha registrado en los últimos días. Portugal superó este miércoles el medio millón de casos de covid-19, en una jornada en la que se notificaron 10.556 contagios y 156 fallecidos, nuevos máximos de toda la pandemia.

El país, con 10 millones de habitantes, acumula 8.236 muertos y seis días consecutivos por encima del centenar diario. Muchos hospitales ya están en el último nivel del plan de contingencia e incluso han tenido que trasladar a pacientes a otros establecimientos.