El porcentaje de inmunización en el país es inferior al 40 %, uno de los más bajos de Europa, mientras que cada día se contabilizan más de 1.200 muertos
24 nov 2021 . Actualizado a las 18:51 h.Los médicos de los principales hospitales rusos especializados en covid-19 invitaron este miércoles a políticos y personalidades contrarios a la vacunación, en una carta abierta, a visitar las unidades de cuidados intensivos (ucis) y morgues, en momentos en que los niveles de mortalidad se acercan al récord.
Desde hace varias semanas las autoridades rusas notifican una media de algo más de 1.200 muertes diarias, una de las cifras más altas de todo el mundo. A esta situación se añade el hecho de que Rusia es uno de los países europeos con menor tasa de vacunación, ya que solo el 36,8 % de sus ciudadanos han recibido la pauta completa.
«Conocemos vuestra posición respecto a la vacunación. Ahora estamos bastante ocupados y ustedes ya imaginan en qué. Sin embargo, considerando cuánta gente les lee y escucha, hallaremos tiempo para llevarles por las 'zonas rojas', ucis y morgues de nuestros hospitales», señalan en la misiva.
«Puede que después de ello vuestra posición cambie y mueran menos personas. Les esperamos», instan en la carta. Entre los antivacunas mencionados en la carta abierta figuran los diputados de la Duma rusa Guennadi Ziugánov, secretario general del Partido Comunista ruso, y Serguéi Mirónov, de Rusia Justa.
Además, se remitieron copias de la misiva al vicepresidente de la Duma rusa Piotr Tolstoi; al diputado Viacheslav Lisakov; al cantante de folk-rock Yuri Lozá; al líder de la banda de rock Alisa Konstantín Kínchev, y a los actores María Shukshina, Egor Beróyev y Oskar Kuchere, entre otros reconocidos antivacunas.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, valoró «muy positivamente» la carta abierta de los directores de hospitales y expresó su confianza en que el «prestigio indiscutible» de sus firmantes ayude a al menos algunos de los destinatarios a cambiar de opinión.
En su rueda de prensa telefónica diaria, Peskov admitió que en el país hay un sector de la población que es contrario a la vacuna, pero recalcó que es una situación que se da en todos los países, «en unos más que en otros». Pero en muy pocos, pese a sus palabras, el rechazo a la terapia preventiva para combatir la infección es tan grande como en Rusia.
Aunque la cifra de contagios se reduce paulatinamente, hasta caer durante la última jornada a 33.558 casos, apenas 438 menos que la víspera, el número de muertes fue de 1.240, cercano al máximo diario absoluto de 1.254. Desde hace unas tres semanas, Rusia mantiene esta cifra estable de muertes diarias.