Las cifras de contagios congelan las ansias de librarse de las mascarillas

J.V. Lado / tamara montero REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

CARMELA QUEIJEIRO

Los consejeros llegan a Zaragoza divididos. Galicia pide prudencia y escucha activa de los expertos, Euskadi se posiciona en contra y Madrid a favor, con excepciones

10 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La ministra Carolina Darias y los responsables de Sanidad de las distintas comunidades se reúnen hoy en Zaragoza con dos cuestiones fundamentales sobre la gestión de la pandemia sobre la mesa: la primera es el nuevo sistema de vigilancia, orientado a la convivencia con el virus. La segunda es la posibilidad de retirar las mascarillas en el interior, una cuestión que se debate en un contexto de ralentización de salida de la sexta ola, con repuntes en la transmisión (en Galicia se notificaron en el último día 1.900 positivos de covid-19 y vuelve a haber más de 17.000 casos activos) y con disparidad de opiniones: Euskadi en contra, Madrid a favor y Galicia en la senda de la prudencia.

Sanidade insistía estos días que toda decisión debe estar condicionada por la situación epidemiológica y la cobertura vacunal y los datos del conjunto de España indican un frenazo claro en el recorte de los contagios, cuando no un cambio de tendencia. La incidencia acumulada a 14 días se ha recortado solo cinco puntos en las últimas 24 horas y se sitúa en 430 casos por cada 100.000 habitantes. Cuatro comunidades incluso incrementan ya sus cifras: el País Vasco apenas cuatro puntos y Galicia y Baleares, once, pero Extremadura ha subido 39 en un solo día.

Además, en Cataluña, el informe de ayer de la Generalitat muestra que todos los indicadores epidemiológicos del coronavirus empeoran por segundo día consecutivo y la velocidad de propagación se ha vuelto a situar por encima de uno. Es decir, cada infectado contagia a más de una persona, aunque los epidemiólogos que asesoran al Gobierno catalán todavía no se deciden a la hora de interpretar estas cifras como el preludio de una séptima ola o como el resultado de las aglomeraciones y las fiestas del Carnaval.

Donde sí se señala directamente al entroido es en Galicia (solo en el área de Ourense se han notificado casi 1.900 casos nuevos en la última semana), aunque la presión asistencial sigue a la baja. Este miércoles ha sido la primera vez en tres meses que hay menos de 400 pacientes ingresados, 30 de ellos en la uci. El mal dato es el de fallecimientos, con 3.138 tras incorporarse dos más en las últimas horas.

Con este panorama las comunidades llegan hoy a las jornadas del Sistema Nacional de Salud sobre vigilancia en Salud Pública de Zaragoza completamente divididas. El encuentro de los consejeros, que debía servir para perfilar un verdadero sistema de información sanitaria del que España carece, está precedido de las reuniones de ayer de la comisión de Salud Pública, de las que no ha trascendido decisión alguna, y de un intercambio de declaraciones que no hacen más que sembrar el desconcierto.

El consejero madrileño adelantó que pedirán la supresión de las mascarillas en todos los interiores, excepto residencias, hospitales y transporte público, El presidente andaluz, Juanma Moreno, también apuntó en ese sentido, aunque de una forma «gradual y responsable, siguiendo siempre el criterio de los expertos». Esa escucha activa es lo que ha venido reclamando la Xunta, y el subcomité clínico ha sido hasta el momento unánime: es demasiado pronto para retirarlas e incluso se siguen recomendando en los patios hasta que se finalice la vacunación infantil, algo que está previsto la próxima semana.

El portavoz del Gobierno extremeño, Juan Antonio González, criticó a las comunidades «sensacionalistas», en referencia velada a Madrid, porque «esto no es cuestión de a ver quién lo dice primero» sino en el consenso, una opinión similar a la de la consejera de Salud del País Vasco, Gotzone Sagardui.

En estos momentos la opción que tiene más visos de convertirse en realidad es la planteada por Cataluña: empezar a retirar la mascarilla en los colegios, para ver cuál es la evolución y en función de eso avanzar para quitarla en todos los espacios interiores.