La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha asegurado que el aumento de los casos de la hepatitis aguda infantil de origen desconocido es un tema «muy urgente» al que están dando «prioridad absoluta».
«Trabajamos muy estrechamente con el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades en la gestión y coordinación», aseguró ayer en Lisboa el director regional de Emergencias de la OMS, Gerald Rockenschaub.
El especialista explicó que han puesto sobre aviso a varios países para «estar atentos a esto más específicamente», tras el aumento de casos reportados.
«Estamos haciendo todo lo posible para identificar rápidamente lo que está causando esto y después tomar las medidas adecuadas, tanto a nivel nacional como internacional», recalcó.
Los primeros diez casos de esta hepatitis aguda fueron notificados por el Reino Unido a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 5 de abril, en niños menores de diez años sin dolencias previas, y desde entonces también se han detectado contagios en España, Israel, Dinamarca, Italia, Estados Unidos y Bélgica, entre otros.
En Portugal, país que todavía no ha detectado casos, acaban de crear un grupo especial para seguir la situación.