Isabel II sale al balcón del palacio de Buckingham en el comienzo del jubileo de platino

Martín Bastos

SOCIEDAD

La reina no hizo el tradicional saludo a los regimientos durante el desfile Trooping the Colour y mañana seausentará por problemas de movilidad. El príncipe Enrique y Meghan Markle asistieron a la parada militar

02 jun 2022 . Actualizado a las 21:51 h.

Setenta años cumplidos en el trono de Inglaterra. Isabel II celebra desde este jueves y durante cuatro días su longevo reinado sobre el pueblo británico con los fastos del jubileo de platino, pero ya el primer día le ha pasado factura. La reina, que cumplió 96 años en abril, salió al balcón del palacio de Buckingham, en Londres, para el saludo oficial al término del desfile militar Trooping the Colour, que marca el comienzo de un amplio programa de festejos para un momento histórico. Sin embargo, debido a sus problemas de movilidad, no hizo el saludo a los regimientos británicos en el patio de armas de Horse Parade y este viernes se quedará finalmente descansando en lugar de asistir al servicio en la Catedral de San Pablo, como estaba previsto. Fue grande el tute de este jueves, porque, aun estando cansada, no quiso prescindir del tradicional saludo desde el balcón de palacio donde, para la ocasión, lucía un enorme estandarte real. El príncipe de Gales, a caballo, pasó revista a las tropas en su nombre.

La reina, con un abrigo azul celeste y pamela a juego, salió al balcón junto a su primo el duque de Kent para saludar a los regimientos que desfilaron frente a ella. Se apoyaba sobre un bastón, regalo del ejército en conmemoración de este día. En cuanto apareció la monarca, se pudieron escuchar los gritos de miles de personas que ocupaban la gran avenida de The Mall, que une el palacio real con Whitehall, la zona gubernamental del país.

Han sido pocas las ocasiones en que la reina Isabel II ha sido vista en público en el último año debido a sus problemas para andar. Además, desde la pandemia del covid-19, enfermedad que ella misma superó en febrero, la monarca permanece instalada en el castillo de Windsor, fuera de Londres, y ha decidido establecer allí su residencia definitiva.

La discreta presencia de Enrique y Meghan Markle

Al desfile militar acudieron los miembros de la familia real. En el primer carruaje viajaban Camilla Parker, duquesa de Cornualles, y Kate Middleton, duquesa de Cambridge, junto con los tres hijos de esta última, los príncipes Jorge, Carlota y Luis. El príncipe Guillermo desfiló a caballo con uniforme militar, como también lo hizo la princesa Ana, hija de la reina, vestida con uniforme militar.

El hijo pequeño de los duques de Cambridge fue el más espontáneo de la celebración y acaparó la atención de su bisabuela. El pequeño lució el mismo traje de marinero que había llevado su padre con motivo del Trooping the Colour de 1985.

En un segundo plano de los actos se mantuvieron el príncipe Enrique y Meghan Markle, que no salieron a saludar desde el balcón de palacio tras la decisión adoptada por Isabel II de que solo lo hicieran los miembros en activo de la familia real. Pero los duques de Sussex sí asistieron previamente a la parada militar celebrada en el patio de armas de Horse Parade. Ambos permanecieron de forma discreta en el balcón del edificio del Major General's Office acompañados por otros miembros de la familia, entre ellos la princesa Beatriz y su marido, Edoardo Mapelli Mozzi, y algunos niños.

Esta meditada decisión de no posar en la foto oficial responde a la estrategia de dar todo el protagonismo de este día a Isabel II, ya que una mayor exposición pública del hijo menor de Diana de Gales junto a su esposa eclipsaría los homenajes a la soberana.

Enrique y Meghan viajaron expresamente desde Estados Unidos para la conmemoración de los 70 años de reinado de Isabel II y se espera que en estos días hagan la presentación oficial a la reina de su hija pequeña, Lilibeth Diana, quien el sábado cumple un año. Está prevista su presencia oficial este viernes en la misa de acción de gracias que tendrá lugar en la catedral de Saint Paul. Esta es la primera vez que Meghan Markle está en el Reino Unido y ve a su familia política desde que a principios del 2020 la pareja anunció su marcha de la familia real británica.

Meghan Markle lucía un vestido azul marino con escote barco y una pamela blanca con gran lazada en el mismo color que su vestido. A diferencia de los miembros titulares de la familia real, que lucían uniformes y distinciones militares, el príncipe Enrique llevaba un discreto traje oscuro. Durante su estancia en el Reino Unido permanecen alojados en su antigua residencia de Frogmore House. 

El príncipe Andrés, positivo por covid-19, no estuvo presente en los actos de este jueves y tampoco acudirá a la celebracion religiosa del viernes.

El primer ministro británico, Boris Johnson, y su esposa, Carrie Johnson, también se encontraban entre los asistentes.